Desde la asociación Búscome se hicieron eco ayer de la denuncia pública “por la incomprensión y la pasividad de quienes tienen la potestad de solucionar el problema o, al menos, incidir contra el Gobierno en la búsqueda de remedios que posibiliten el que una banda musical pueda tocar en las mejores condiciones posibles, cuando encima tiene el derecho de hacerlo”.
“Este Gobierno se ha caracterizado por su mala gestión a la hora de ofrecer locales. No existe un sistema objetivo, justo y transparente en la concepción de los mismos y son muchas las entidades que no pueden acceder a uno, mientras otras lo tienen en el mismo momento que lo solicitan”, afirmó Búscome en un comunicado.
“No compartimos el hecho de que no exista un criterio igual para todo el mundo que lo solita y mucho menos que la Ciudad conciba autorizaciones, a través de Consejerías que no tienen potestad para ello, y luego nadie depure responsabilidades”, apostilló la asociación.
Y es que, inciden desde Búscome, “la Banda musical Nuestro Padre Jesús Caído y Virgen de la Amargura, que agrupa a 70 chavales, está ensayando en el puerto, lugar donde ya han recibido bastantes asaltos y que, como ha comentado el Presidente a nuestra asociación, no se sienten seguros”.