La Liga Nacional de Fútbol Profesional de Marruecos ha decidido este martes decretar el aislamiento para todos los equipos de la Primera y Segunda División de la Liga Botola. Esta medida se ha acordado tras dispararse los casos de coronavirus en los clubes de la Botola Pro 1 y Pro 2, lo que estaba provocando aplazamientos de encuentros entre los clubes.
Se ha conocido que los 32 equipos pasarán el resto de temporada en hoteles y alojamientos, aislados y los jugadores y el personal técnico de los equipos solo viajarán para ir a entrenamientos y partidos.
Un protocolo estricto que todos los clubes deben seguir para reducir el riesgo de contagios y que el campeonato pueda continuar en unas condiciones óptimas de seguridad sanitaria.
Brotes, partidos con equipos en cuadro…
Esta decisión culmina una serie de noticias que se han ido sucediendo en torno al fútbol marroquí y el coronavirus. Los casos positivos dentro de los clubes han sido constantes, pero uno de los que más llamó la atención fue el Ittihad Tánger: el pasado 9 de agosto, se detectó un brote de 26 contagiados, entre jugadores y cuerpo técnico. Al día siguiente, la Liga obligaba en principio a jugar al club a pesar de carecer apenas de plantilla para disputar el partido.
Así, el Sindicato de Entrenadores Profesionales de España informaba de que el Ittihad Tánger, que entrena Juan Pedro Benali, fue obligado a jugar el martes pese a que tiene 26 positivos por COVID-19, entre ellos el propio técnico español, cuya delicada salud le hace ser persona de riesgo.
El Ittihad Tánger, que fue campeón de liga por primer vez en la campaña 2017/2018, es ahora decimoquinto y penúltimo en la clasificación, sólo por delante del Raja Beni Mellal. Ambos, en puestos de descenso a la Botola-2.