Izaskun Bernal eligió ayer el Mercado Central para dar el pistoletazo de salida a los actos de campaña de su partido. Antes de recorrer las instalaciones para repartir folletos y trasladar a los comerciantes algunas de las claves del programa con el que los socialistas concurren a las elecciones del 25 de mayo,
la candidata ceutí incidió en dos de las propuestas que considera vitales para el futuro de la ciudad: el reconocimiento “permanente y estable” de ésta en el reparto de los fondos europeos, por los que el PSOE “peleará”, y un incremento en la presencia de Ceuta y Melilla en el Comité de las Regiones y en la Red de Oficinas Regionales de Bruselas. Dos medidas, subrayó, que podrían aparentar coincidencias con las esbozadas por el Partido Popular, pero de las que se esforzó en esclarecer las diferencias. “A nosotros nos avala que llevamos mucho tiempo trabajando sobre ello, sobre la estabilidad pese a estar en minoría en el Parlamento Europeo y a pesar de la resistencia del PP con el concepto de Ciudad Fronteriza Alejada”, subrayó para despejar dudas.
La primera de las apuestas, la que intenta evitar que mengüe el montante de fondos que llegan a Ceuta desde Bruselas, incluye una doble vertiente: “presionar” para que la UE conceda a las dos ciudades autónomas “una categoría especial, diferente, porque no somos una Región Ultraperiférica ni nos podemos acoger a ninguno de los grupos regionales del Tratado Europeo” y, por otra parte, estudiar posibles alianzas con otras regiones de los 28 para, una vez estrechados los lazos, batallar “por proyectos de interés común” en infraestructuras, turismo o medio ambiente. “Normalmente así se consiguen fondos de manera prioritaria”, auguró Bernal. A su juicio, el hecho de que Ceuta haya descendido un peldaño en la escala de regiones prioritarias de la UE y ahora se le considere área desarrollada responde a que “en las negociaciones de los criterios no se tuvieron en cuenta factores como la alta tasa de paro”. Un hecho que, considera, contrasta con la gestión que realizaron en su día los gobiernos socialistas. “Me gustaría recordar a Vivas que fue Felipe González el que negoció por primera vez los fondos regionales entre críticas feroces de Aznar, y que Zapatero logró 50 millones de euros extra por primera vez para Ceuta y Melilla, algo por lo que también se le criticó y sobre lo que Rajoy no ha conseguido ni más ni menos”, censuró.
En el caso de la presencia en el Comité de las Regiones, la candidata de la lista socialista recordó que su secretario general, José Antonio Carracao, ya lanzó una propuesta a su regreso del encuentro de trabajo que mantuvo en Bruselas. El PP, aclaró, “pese a incluirlo en su programa, tiene grandes contradicciones como las declaraciones de Valcárcel, que habló de observadores, y de Floriano defendiendo su presencia. Yo le pido al PP que se aclare con su programa”, recomendó antes de apostar por incluir a Ceuta en la Unión Aduanera “para beneficio de los comerciantes”.
JJSS difunde un cartel en el que anima a Salcedo a “dar la cara” en un debate
El PSOE intuye que ha encontrado un filón en la negativa de Rocío Salcedo, candidata del PP, a entablar un debate público con Izaskun Bernal. Tras las críticas lanzadas por el secretario general, José Antonio Carracao, y la propia Bernal la noche del arranque de la campaña, ayer fue Jóvenes Socialistas (JJSS) quien retomó el argumento. En una rueda de prensa en la sede del partido, David Serrán y Mayda Daoud cargaron contra la “actitud antidemocrática” del primer partido de la Asamblea al cerrar de un portazo la posibilidad del enfrentamiento dialéctico entre ambas e incluso con Mohamed Alí, de Primavera Europea.
Ambos censuraron a Salcedo por “no dar la cara” y le afearon su “escasa ética” por continuar al frente de una organización juvenil, Nuevas Generaciones, “con 32 años”. “Parece tener un vago interés por la ciudadanía con este veto, un hecho inaudito”, subrayaron. Para reforzar el mensaje, JJSS lanzó ayer a través de las redes sociales un cartel en el que aparece Salcedo dentro de un cajón bajo el lema Sal del cajón y acepta el debate.