La tierra rota, lenta pero indefectiblemente día a día, anocheciendo ciudades e iluminando a las gentes, rutina necesaria de la existencia, cuerda de relojes. Pero hay, dentro del universo del movimiento, infinitas maneras de girar y ¿acaso no levita Ceuta al son de música de ballet y se desplaza en paso de danza a tenor de los espectáculos que las numerosas y prestigiosas escuelas de la ciudad programan para deleite de cientos de ciudadanos?
Así, danzando, cerraron un curso cargado de esfuerzo y superación las alumnas de pre-ballet y nivel iniciales y medio de la escuela de danza Lesmes. Con un despliegue de técnica y, sobre todo, de amor por la danza las pequeñas bailarinas supieron conquistar a los corazones más candentes con el ballet más ‘gélido’. Lesmes presentó su particular versión del universo Disney de Frozen en el que las alumnas del pre-ballet consiguieron que el Revellín al completo se soltase en aplausos y agasajos. Un reconocimiento más que merecido fue el de este espectáculo rico en coreografías, con elaboradas danzas y un apasionante vestuario que trasladó al publico a vivir, nuevamente, esa tierna infancia.
Las pequeñas encantaron y deleitaron, al igual que lo hicieron sus compañeras de los niveles iniciales y medio con su actuación en la segunda parte, donde traspasaron el hielo para poner un colofón flamenco con Gitanillas Souvenir.
