El Contencioso Administrativo ha recogido en uno de los autos más esperados lo que ya se intuía que pasaría en relación a las repatriaciones de los menores marroquíes. Advierte de que solo es posible llevar a cabo tal trámite si se respeta el ordenamiento jurídico, sin que pueda ponerse como excusa la aplicación de un acuerdo, el de 2007 entre España y Marruecos, del que se ha echado mano de manera bastante confusa. La conclusión supone un varapalo a Interior y ha forzado a que el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocara de urgencia una reunión con el presidente Juan Vivas, que tendrá lugar este miércoles en La Moncloa.
Ceuta tiene un grave problema, no puede hacerse cargo de tantos menores ni los puede seguir manteniendo en las condiciones en que están: unos, dentro de un polideportivo; otros, en dos espacios sin protección y llenos de concertinas. A estos se suman los menores que han escapado y que se encuentran en las calles, sobre todo en la zona portuaria, expuestos a cuantiosos peligros. A la vuelta de la esquina, como quien dice, tenemos el inicio del curso escolar y la obligatoriedad de escolarizar a un buen número de estos niños, sin que Ceuta disponga de medios. La situación se presenta muy muy complicada y si algo tiene que salir en la reunión de este miércoles es el compromiso real y efectivo por parte del Estado de comenzar por la vía de urgencia a fijar medidas para atender a esta población infantil.
El auto del Contencioso, aunque puede recurrirse, es bien claro, dejando por verificado que ha podido existir una vulneración del derecho a la tutela judicial efectiva, debiendo protegerse a los menores. La respuesta del Contencioso se refiere únicamente a los 9 menores en cuya defensa acudieron varias oenegés, pero fue la propia Ciudad la que decidió extender paralizar todo el proceso.
Ya la Fiscalía ha ido marcando en estos días cuál era el camino adecuado, el que debía haberse tomado en torno a un procedimiento cuyas formas han fallado, aunque si bien es entendible la inquietud que presenta un Gobierno local enfrentado no solo a una situación tan excepcional como la derivada de las entradas de mayo sino a tener que asumir competencias que no son suyas, debido a la queja y al clamor social por la tensión a la que se enfrenta Ceuta día a día, sin medios para atender lo acontecido.
La clave está en manos de un presidente de todos los españoles que hoy no debe ofrecer solo compromisos, tiene que presentar hechos de aplicación inmediata. Ceuta los necesita y con urgencia.
Esto tiene fácil solución....el 90 % de los menores que los manden a la península....repartidos equitativamente y problema resuelto....más fácil imposible.
Las CCAA no los quieren ni en pintura y menos si son marroquíes.