Se ha quedado como un particular barco fantasma. O casi. El ‘Albatrous II’ continúa encallado en Benzú y Salvamento Marítimo ya ha comunicado que debe ser el patrón del pesquero el que presente un plan de reflotamiento para poder retirarlo del lugar. Mientras esto no sucede, el barco sigue en Ceuta mientras su tripulación fue evacuada a Beliones la misma madrugada del siniestro.
Los vecinos de la barriada se están acostumbrando a convivir con una imagen distinta, antes no vista: la de este pesquero que ha quedado encajado, sin posibilidad de movimiento. Durante estos días tanto Salvamento Marítimo como la Guardia Civil y unidades marroquíes han intentado por todos los medios retirarlo pero ahora es obligación del patrón hacer las gestiones para que esto se lleve a cabo.
La situación no deja de ser extraña, pero ciertamente vinculada al sector del mar tan expuesto a este tipo de adversidades. El dueño del barco ha perdido su herramienta de trabajo, toda vez que era uno de los habituales en la zona de Beliones. Una avería le llevó a quedar a la deriva, viéndose empujado contra las rocas debido al fuerte viento de Poniente.
Al otro lado de la frontera, quienes vivían de la pesca a bordo del ‘Albatrous II’ confían en retomar la actividad. Pero mientras tanto, el pesquero queda como un símbolo casi a pie de las viviendas, como un fiel testigo de un incidente que se empeña en no desaparecer.
Durante todo el pasado miércoles y jueves se ha intentado sacar el barco del lugar pero resulta no solo inviable sino que hay riesgo de causar daños mayores. En el dispositivo que se puso en marcha participaron no solo los GEAS de la Guardia Civil sino también el Servicio Marítimo que contó con la colaboración de la propia tripulación de pescadores.