Recientemente, el escritor de Ceuta Paco Sánchez ha publicado el libro ‘Mujeres Ceutíes Olvidadas. Represión, cárceles y fusilamientos (1936-1958)’, con el que pretende rendir un homenaje a las féminas que sufrieron represión tras el golpe militar de 1936.
Hasta que vio la luz, el autor estuvo investigando durante unos cuatro años, en los que consultó más de 500 expedientes de mujeres que fueron represaliadas. Entre todos ellos encontró un “asunto”, tal y como él mismo ha definido, que estaba protagonizado por Alberto Puig Palau, más conocido por ser el ‘Tío Alberto’ de la canción de Serrat, y su hermana Pilar Palau, así como por el alto comisario Juan Beigbeder. Nunca había sido contado.
Los hechos a los que se hacen referencia ocurrieron entre 1937 y 1943 en las ciudades de Ceuta, Tetuán y Tánger. Todo comenzó cuando Alberto Puig fue destinado a Tetuán en junio del año 37 al grupo de Regulares, en el noveno tabor.
Una vez allí, “el comandante de ese grupo de Regulares vio que Alberto es una persona con muchas cualidades, que sabe cinco idiomas y que le puede venir bien al alto comisario, Juan Beigbeder, que acababa de tomar posesión”, detalla el autor. Finalmente se convirtió en el secretario particular del Alto Comisario.
Al poco tiempo, Alberto Puig cayó enfermo y su hermana Pilar viajó hasta Tetuán para visitarlo. Su figura tampoco pasó desapercibida para Beigdeber, ya que “mientras el hermano se recuperaba, ella asistió a todas las fiestas y recepciones de la Alta Comisaría en los diferentes consulados”, añade.
Tanto es así, que un día, en casa de Alberto, ya a finales de 1937, Pilar coincide con Beigdeber y “le ofrece a Pilar la posibilidad de ser espía de los nacionalistas en Tánger. Al principio está un poco reticente y ella finalmente acepta. Le puso a su disposición un coche, chófer y el dinero que pudiera necesitar”.
De este modo, la protagonista se va a Tánger y allí “se reúne con todo lo que en aquel momento era Tánger, con republicanos, exiliados, con toda la élite y la burguesía que estaba allí exiliada”. Sin embargo, “Pilar tampoco pasa desapercibida para los exiliados y los republicanos que están en Tánger y les ofrecen ser espía de ellos”, sin saber que también espía para el bando contrario.
Pilar Puig “se reúne con Madame Joste y esta agente francesa habla con Pilar y le dice que como ella va mucho a Tetuán podría servir mucho a los republicanos la información que le pudiera pasar”. Contra todo pronóstico, Pilar Puig acepta y “en un momento dado nos encontramos a Pilar que es una doble espía”, recalca Paco Sánchez.
Esta situación se mantuvo durante unos meses hasta que en junio de 1938 Juan Beigdeber recibe un mensaje del Servicio de Investigación de la Policía Militar donde “dicen que tienen constancia de que Pilar está espiando a favor de los republicanos y que hay que investigarlo”. Seguidamente, “la maquinaria se pone en marcha. Cuando se descubre todo ella está en Burgos, la detienen y la llevan a la cárcel de Burgos”, donde estuvo durante un año aproximadamente.
Allí comenzó a realizarse un Consejo de Guerra, que actualmente se encuentra en el Archivo Intermedio Militar de Ceuta. Sin embargo, el auditor de guerra de la Región Militar de Burgos, José Casado, alegó que ellos no debían juzgarla, sino en el lugar donde los hechos se habían producido: en Ceuta y en el Protectorado español en Marruecos. “Hay un tira y afloja y en julio de 1941 se produce el sobreseimiento provisional y en diciembre de 1943 se archivó la causa”, quedando ella en libertad, concluye de relatar Paco Sánchez.
Aunque hay muchos libros escritos sobre el hermano, Alberto Puig, nunca se había hablado de esta historia protagonizada por Pilar, hasta que el escritor ceutí lo ha sacado a la luz.
Me parece muy interesante el tema, ¿cuando se podrá comprar?
En cualquier librería de Ceuta ya se puede adquirir.