Septem Nostra ha presentado por registro una solicitud de información para conocer todos los detalles de la tala llevada a cabo en zona protegida en Calamocarro, que fue denunciada por la propia entidad ecologista. La asociación quiere saber si la empresa que ha realizado los trabajos de desbroce del entorno contaba con la autorización de la Ciudad, que es la responsable de las zonas protegidas y, por tanto, de velar porque sigan así. De no haber contado con esos permisos, Septem Nostra quiere saber si actuó por su cuenta y riesgo.
De igual manera, en el caso de que se hubiera expedido una autorización, Septem pregunta si por parte de la Ciudad se ha exigido informe de impacto ambiental y si se ha sometido previamente a información pública.
“En caso de existir informe de impacto ambiental, solicitamos nos sea enviada una copia así como los informes técnicos que autorizaban la tala de árboles eliminados durante esta actuación”, expone su presidente, José Manuel Pérez Rivera, que advierte de que los destrozos han afectado al patrimonio arbóreo local.