Por más aterrador que pueda ser un diagnóstico de un trastorno mental, siempre hay una luz al final del túnel, sobre todo cuando los pacientes cuentan con un apoyo tan valioso como el del Comité Pro Salud Mental en Primera Persona, integrado en Ceuta por nueve personas que, ayudados con sus experiencias, hacen todo lo posible por caminar junto a quienes lo necesitan.
Desde la Asociación Salud Mental Ceuta (ACEFEP) explican que el grupo está conformado por personas afectadas por problemas de salud mental que colaboran con la entidad como asesores. “Son todos voluntarios, se hacen voluntarios de la asociación porque también colaboran con nosotros en otras actividades de sensibilización y antiestigma”.
Señalan que estos comités son autonómicos. “Nosotros pertenecemos a una red estatal, que es la Confederación Salud Mental España, que fue la que promovió este tipo de grupos, intentando fomentar que se creara uno por Comunidad Autónoma y nosotros por ser Ciudad Autónoma, tenemos un único comité”. En Ceuta el Comité Pro Salud Mental en Primera Persona nació en marzo de 2014 con una importante tarea por delante.
Basilio García Copín, presidente de ACEFEP Ceuta y miembro del Comité Pro Salud Mental en Primera Persona, recuerda que en principio la organización era de familiares. “Las personas usuarias o con un problema de salud mental jugábamos un rol pasivo, pero como un exceso de paternalismo también puede conducir a una indefensión, entonces se trató de cambiar ese paradigma de rol pasivo hacia un rol social de participación, empoderamiento y autonomía”.
Funcionan bajo la filosofía de que “solo participando conocemos nuestro talento”. García Copín señala que estos comités nacieron a nivel nacional hace 12 años, habiendo 310 asociaciones en toda España. Explica que desde la estructura central de Madrid, surgió esa oportunidad de formar un comité con personas con experiencia propia en el campo de la salud mental, “para promocionar la participación dentro de lo que es la estructura organizativa”.
"Los problemas de salud mental son una circunstancia y no hay que sentir vergüenza"
También define el grupo como “un espacio para el ejercicio de la responsabilidad, porque si una persona acepta un compromiso, es un elemento de desarrollo personal muy importante, y en ese sentido también ejercemos la representación de las personas con problemas de salud mental” a lo que agrega que “nuestras acciones se centran sobre todo en la sensibilización, en trasladar una imagen positiva, tanto dentro de nuestra organización como hacia la sociedad, para que se aleje de esa visión preconcebida que es el estigma”.
Quienes integran el comité acompañan a los técnicos de ACEFEP en algunas de las charlas del programa ‘Descubre’ para los alumnos de 3º y 4º de la ESO y también llevan información a los distintos grados de la universidad. Asimismo, como parte del programa Promoción de la Salud Mental y Prevención de la Exclusión, una vez al mes, el Comité Pro Salud Mental en Primera Persona, realizan charlas-coloquios con los participantes de otros programas en la ciudad. Pero destacan como uno de sus orgullos, el haber desarrollado el cuento de sensibilización ‘Alex y sus amigos imaginarios’, que va acompañado de una yincana de conocimientos en los centros educativos, para que desde tempranas edades, los jóvenes entiendan que los problemas de salud mental “son una circunstancia y que no hay que sentir vergüenza, al contrario, hay que aceptar la diversidad”. También, todos los años, realizan una campaña de sensibilización llamada ‘Ceuta una ciudad sin estigma’.
García Copín comenta que uno de los objetivos que persiguen es que en la ciudad se hable más sobre la salud mental, siendo el estigma el enemigo a batir y “para eso precisamente toda nuestra labor de sensibilización”. Destaca como una ventaja que Ceuta sea una ciudad pequeña, pues el mensaje llega más rápido “y gracias a nuestra labor poco a poco va habiendo una visión más positiva hacia la realidad que vivimos las personas con problemas de salud mental, que es una realidad de normalidad y de que se puede salir adelante, que el anuncio de un diagnóstico no es el fin, sino el comienzo de una historia de superación”.
Pero, aunque está satisfecho con los avances, señala que queda ese último paso para la inserción total, “que es conseguir un proyecto de vida independiente”, dentro que lo que está la inclusión laboral.
Un poderoso mensaje que envía a quienes padecen alguna enfermedad mental es que “si te aíslas no experimentas experiencias positivas”, animando a quien lo necesite a “darle vuelta al prejuicio y trasmitir que somos nosotros los protagonistas de nuestra propia historia de superación”.
“Al principio no eres consciente de lo que está pasando, hay mucho rechazo”
El presidente de ACEFEP Ceuta habla desde su propia experiencia al insistir en que los problemas de salud mental “son una circunstancia natural y uno puede entrenar sus habilidades y proyectarse hacia una vida social plena que es nuestro testimonio de superación”. Cuenta que “después de esa etapa de aislamiento, entre el disgusto por el diagnóstico y los primeros medicamentos que son muy invasivos, quedas fuera de forma y tiendes a aislarte”. Pero buen día un día se dio cuenta que esa no era la respuesta y se integró en la vida de ACEFEP a través de un taller de narrativa, y fue avanzando. “No podemos hablar de recuperación si no hay esperanza e ilusión y para ello hay que participar”, recalca.
Otro ejemplo de superación es Patricia Martínez Cortés, quien también forma parte del comité. Recuerda que como usuaria de ACEFEP, estando en el grupo de terapia, fue que se enteró de la existencia del mismo. “Pero hasta que no empecé a mejorar en la terapia, no me decidí a participar”. Poco a poco se fue poniendo al día sobre las labores que hacían y su historia en el comité comenzó a escribirse en 2016.
Ya con varios años en él, Martínez Cortés destaca la importancia de esta iniciativa. “Cuando tienes un problema de salud mental y sobre todo como en mi caso cuando te dan una incapacidad para toda profesión y oficio, tú ya piensas que no eres útil, que ya no vas a poder trabajar, ni aportar nada, entonces cuando te dan la oportunidad de participar en un comité, de dar ideas, de colaborar con una asociación, y ayudar a otras personas que están pasando lo mismo que tú, para que encuentren la solución o la salida antes de que la encontraste tú, es sumamente importante”. Califica esta experiencia como algo reconfortante.
Recuerda cómo se sintió cuando recibió su diagnóstico. “Al principio no eres consciente de lo que está pasando, hay mucho estigma, mucho rechazo, pierdes la confianza en ti misma”. Pero cuando pasó a formar parte del grupo de terapia, comenzó no solo a compartir sus experiencias, sino también soluciones. “En nuestro grupo de terapia tenemos un psicólogo que es el que coordina la terapia, pero entre compañeros nos damos consejos y nos damos herramientas”.
Martínez Cortés agradece la gran oportunidad que tiene como voluntaria y pone en valor ese apoyo que es fundamental para “recuperar tu vida, volver a trabajar, relacionarte con la gente, hacer nuevas amistades”.
Hay que mirar otros paises europeos como tratan a estos enfermos ya que en algunos paises tienen verdaderos hoteles y médicos pendientes de ellos. Las terapias son el parche para pasar el tiempo, hay que fomentar participación, con la sociedad, la naturaleza, y todo con la voluntad del paciente en seguir adelante y sobre todo esa atención medica que escasea por su ausencia