La Fundación Bertelsmann ha incluido dos actuaciones de Ceuta en su catálogo 2021 de ‘Buenas prácticas en Formación Profesional Dual en España. 14 indicadores europeos de calidad, 102 ejemplos autonómicos’. Se trata, por un lado, del apoyo promocional y difusión que la Dirección Provincial del MEFP y los centros dan desde 2018 a las empresas involucradas en ese tipo de formación a través de redes sociales, programas de televisión pública y privada, radios locales y notas de prensa.
También se menciona como elogiable la formación de grupos de trabajo en los institutos para “estudiar la viabilidad de implantar la modalidad Dual en los ciclos formativos que se imparten”. En este caso, previamente a su implantación, “se analizan los módulos y se organiza el contenido y las actividades dando lugar a un programa formativo temporalizado y provisional para mostrarlo a las empresas interesadas.
A partir de ahí, y con la aceptación del mismo, se empiezan a realizar las modificaciones necesarias aportadas por la empresa y se ajusta el plan final de actividades a desarrollar en el centro de trabajo. Actualmente hay cinco para los Ciclos de Laboratorio Clínico y Biomédico, de Gestión Administrativa, de Mantenimiento de Instalaciones Térmicas y de Fluidos, de Atención a Personas en Situación de Dependencia y de Carrocería.
La Orden sobre el currículo de los ciclos de FP bilingües, en audiencia pública
El MEFP mantendrá en fase de audiencia pública hasta el 17 de enero para recibir aportaciones la Orden por la que se establece el currículo correspondiente a los módulos profesionales de lengua extranjera de ciclo formativos de grado medio y superior para el programa bilingüe en enseñanzas de Formación Profesional que, con carácter experimental, prevé poner en marcha en Ceuta y Melilla el próximo curso.
Los institutos interesados en poner en marcha esta modalidad formativa en alguno de los ciclos que imparten deberán presentar a través de la Dirección Provincial un programa de enseñanza que cuente con la aprobación del Claustro y del Consejo Escolar del centro, así como contar con, al menos, cinco alumnos por grupo dispuestos a cursar esa variante.
Tendrán la consideración de “programas experimentales bilingües” aquellos que se organicen “de tal modo que en cada curso se imparta un módulo de Inglés y, al menos, otro asociado a unidad de competencia en el mismo idioma”.