La Consejería de Educación y Cultura de Ceuta ha detectado que, tras comprobar la documentación adjunta a algunas solicitudes de ayudas para cursar estudios universitarios y otros, presentadas por los interesados, algunas de ellas no vienen acompañadas de todos los documentos que se exigen para su correcta tramitación.
Es por este motivo, y ante las quejas por el retraso en su concesión, que la consejería ha abierto un plazo adicional, que empieza mañana, 19 de noviembre y se extenderá hasta el próximo 2 de diciembre, para aportar los documentos que faltan en dichas solicitudes y que están generando retrasos a la hora de recibir las ayudas.
La subsanación de la documentación que falta se realizará de manera presencial en las dependencias del Negociado de Educación, en el departamento de becas y ayudas, ubicadas en la segunda planta del palacio de la Asamblea, aunque también se pueden realizar en las oficinas del registro de la Ciudad, siendo necesario, en ambos casos, concertar cita previa. Para mayor comodidad de los interesados, también se informa de que estos trámites se podrán realizar a través de la Sede Electrónica de la Ciudad.
Esta falta de documentación afecta a más de 170 de las solicitudes que han reclamado esta ayuda ordinaria para cursar estudios universitarios y otros, siendo detectado por el personal responsable de su tramitación, que no adjuntan documentos exigidos en la base quinta de las Bases de la Convocatorias, para lo que han publicado un listado donde figuran aquellas a las que le falta algún tipo de requerimiento, así como en el tablón de anuncios del Palacio Autonómico, a fin de que se subsane la falta o acompañe los documentos preceptivos, indicando desde la Consejería de Educación y Cultura, que, en caso de no hacerlo en el plazo de 10 días hábiles contados a partir de la publicación de los requerimientos, será incluido en la relación provisional como excluidos de estas ayudas.
Antiguamente las becas eran para ayudar a que las personas que no tuvieran recursos elevados Y RINDIERAN en los estudios. Ahora se las dan no solo al que suspende todo sino al que ni siquiera se digna en llevar los libros al colegio, libros que hemos pagado entre todos. Encima son compatibles las becas de la ciudad, las del ministerio, comidas (no hay jornada partida, por lo que es innecesario), etc. En definitiva, el colegio ha pasado a ser un hotel. Ya mismo habrá que crear habitaciones para dormir.