Agentes de la Policía Nacional detuvieron este viernes a un marroquí, acogido en las naves del Tarajal y peticionario de asilo, por agredir a un trabajador de Cruz Roja Ceuta, que presta sus labores en el conglomerado de albergues habilitados de manera temporal por la ciudad, como una forma de hacer frente a la presión suscitada por la cantidad de personas que cruzaron en mayo.
Los hechos se produjeron en una de las naves, cuando el trabajador de la entidad humanitaria fue agredido por este acogido, causándole varias lesiones. El afectado presentó el parte de atención médica y denunció los hechos. La Policía Nacional procedió a la detención del implicado, interviniendo antes la vigilancia privada que permanece en este punto de la ciudad, reconvertido en macro-albergue para marroquíes que no han accedido al regreso voluntario a su país.
Cientos de hombres y mujeres permanecen en estas naves a la espera de que se dé una solución a su situación. La Ciudad ha tenido que buscar recursos para evitar que estén en la calle u ocupando asentamientos ilegales. Algunos de estos residentes se marchan en embarcaciones de manera irregular mientras que otros ven, en la petición de asilo, la manera de salir cuando esa solicitud es admitida a trámite.
Trabajo en las naves del Tarajal
Cruz Roja, a través de su red de trabajadores pero también de voluntarios, atiende a los acogidos garantizando el desarrollo de actividades así como el control sobre los mismos. La vigilancia de todo el entorno está en manos de la seguridad privada, procediéndose a la intervención rápida de las fuerzas de seguridad si son reclamadas, como ya ha ocurrido en varias ocasiones.
Una vez procedida a la detención, el detenido es puesto a disposición judicial por las lesiones provocadas de las que tendrá que responder penalmente.