Un taxista marroquí ha sido condenado a dos meses de prisión firme por acosar sexualmente a una clienta dentro del vehículo, en un fallo del Tribunal de Primera Instancia de Tetuán, en el norte de Marruecos.
Según el fallo publicado en el portal de los tribunales, el acusado fue condenado también el pasado miércoles a pagar una multa de 2.000 dirhams (184 euros), en una sentencia que puede considerarse como ejemplarizante.
El diario electrónico local presstetouan.com precisó que el taxista fue condenado pese a que la víctima retiró su denuncia, en uno de los primeros juicios de estas características en Marruecos. Una las reivindicaciones del movimiento feminista marroquí es que los juicios por acoso sexual continúen de oficio, incluso si la víctima retira su denuncia.
Marruecos aprobó en septiembre de 2018 una ley que castiga por primera vez el acoso callejero. La normativa castiga con penas de hasta seis meses de cárcel a las personas que cometen acoso sexual contra la mujer y se duplica la sanción si el autor es compañero de trabajo de la víctima.
El acoso sexual hacia las mujeres es un fenómeno que padecen las mujeres en la calle y en los transportes públicos, pero también en espacios laborales o en comercios, con frases, gestos y hasta tocamientos que son generalmente percibidos como parte de la "cultura popular". En 2018, un grupo de activistas feministas lanzaron una iniciativa contra el acoso callejero repartiendo silbatos por todo el país para animar a las mujeres a silbar ante cada caso de ataque.
Precisamente a mediados del mes de enero, otro joven marroquí procedente de Tetuán fue condenado a un mes de prisión por aparecer en un vídeo de contenido sexual. El vídeo en cuestión fue grabado en 2015, pero se hizo recientemente viral en redes sociales y por eso volvió a estar de actualidad.