Un bloque de vecinos de Agustina de Aragón se ha levantado en pie de guerra contra Acemsa después de recibir la última factura de agua, con cantidades que lejos de ser las habituales pueden ser consideradas desorbitadas. Y es que, de entre los 60 ó 70 euros habituales que solían abonar por el suministro, el último recibo sorprendía a esta comunidad de vecinos con cifras que oscilaban entre los 200 y los 400 euros. El motivo: un totalizador o contador del agua que recibe el inmueble y que al parecer registraba tan descomunal cifra, al parecer por una avería en el sistema de conducción del agua. Tras presentar la pertinente reclamación en la empresa municipal la resolución argumentaba precisamente que es la comunidad la que debe solventar la avería, cuestión en la que se muestran conformes los vecinos, aunque consideran que el aviso de avería debía haberse producido antes, según uno de los portavoces de los vecinos, “esta avería puede llevar meses, pero nos podían haber avisado antes y dar un plazo para solventarlo, pero no de la manera en que han hecho las cosas que sólo esconde un afán recaudatorio”, apunta, a la par que se lamenta de cómo ha llevado Acemsa este asunto. “Desde que ha entrado el nuevo gerente, Emilio Carreira, han cambiado mucho las cosas, y a peor por lo que parece”.
Y es que los vecinos reclaman que la factura sea abonada por la comunidad y no por los residentes de manera individual. “acometen contra nosotros cuando lo menos que podían haber hecho es dar un aviso, pero es más fácil imputarnos unos 1.200 metros cúbicos de agua”.
Pérdidas de agua
Por su parte, fuentes de Acemsa aseguran que el totalizador cuantifica la diferencia entre la entrada de agua y el consumo efectuado por el usuario, “esa diferencia es una pérdida que existe dentro de la comunidad”. Una pérdida que no es algo inusual y que también se produce en otras zonas de nuestra ciudad, como es el caso de Plaza Azcárate y en otros puntos corroborados por Acemsa. Ante estas pérdidas, la empresa municipal ha optado por implantar la medida de instar a cada comunidad de vecinos a solucionar los problemas “porque el agua es un bien que no se debe despilfarrar, ya no sólo por el incremento de la factura, sino porque es un bien que hay que cuidar”.
Este concepto, existente ya en el reglamento de Acemsa, pero que “no se ha cobrado nunca” se aplica a partir de este año “para evitar el despilfarro”, dado que muchos aljibes de nuestra ciudad se encuentran en estado defectuoso.
Desde Acemsa aseguran que destinarán los medios necesarios para reparar estas averías. “Los apoyaremos pero es un tema de la comunidad”, apuntan.
En cualquier caso los vecinos no descartan llevar el tema a sus últimas consecuencias a través de la vía judicial.