Agentes de la Guardia Civil han decomisado en las últimas horas más de 128 kilos de hachís en el transcurso de varias intervenciones llevadas a cabo en el puerto. La más destacada ha sido la protagonizada por dos marroquíes, K.B. y H.B., que fueron sorprendidos en el embarque con 95 kilos ocultos en un doble fondo que tenían preparado en su vehículo.
Con chapa soldada y fibra se había preparado el hueco en donde se introdujo la droga, distribuida en bloques, y valorada en más de 136.000 euros. Los dos marroquíes han sido acusados de un presunto delito contra la salud pública. En otra de las operaciones llevadas a cabo por el Instituto Armado se procedió a la detención de dos mujeres y un hombre que pretendían cruzar a Algeciras con algo más de 32 kilos de hachís escondidos en los faldones laterales de su turismo, modelo Opel Vectra.
En otras intervenciones se procedió a la localización de otros individuos que pretendían llegar a Algeciras con pequeñas cantidades de hachís, todas ellas ocultas en coches y en huecos preparados al efecto. Asimismo se detuvo a dos marroquíes con permiso de residencia en España que ejercían de mulas para el pase de hachís a la península. Uno de ellos portaba un kilo y medio de droga, distribuida en bellotas, que fue detectada tras la realización de varias placas radiológicas en el hospital.
Todos los detenidos en las distintas intervenciones han sido vinculados con un presunto delito contra la salud pública por lo que han sido puestos a disposición del juez.
La droga intervenida ha sido entregada en San Amaro mientras que los vehículos usados para los pases han quedado bajo intervención policial.
Más críticas por el maltrato a los corderos en la Pascua
La Asociación Nacional para la Defensa de los Animales (ANDA) y la organización alemana Animals´ Angels han obtenido el apoyo de otras entidades en su crítica al “grave maltrato” a los animales en Ceuta durante la fiesta del cordero. En un comunicado han apuntado que en el transporte desde las granjas hasta los lugares de sacrificio, los corderos han sido “arrastrados por los cuernos, atados por las cuatro patas como paquetes y amontonados en maleteros de coches”. Además, han subrayado que el sacrificio se sigue haciendo en casas particulares y que la mayoría de los matarifes no son profesionales. Piden que se respete la legislación y normativa europea.