Ceuta ha vuelto a convertirse, con el final de la crisis, también en tierra de emigrantes. La ciudad autónoma encadena once semestres consecutivos con un saldo negativo en lo que al desplazamiento de personas hacia y desde otras provincias del país se refiere. Durante la primera mitad del año pasado, de la que el INE acaba de publicar datos cerrados, Ceuta vio partir a 570 residentes más de las personas que, procedentes de otras Autonomías, desembarcaron aquí.
Se trata de la cifra más elevada desde principios de 2014, cuando se torció la tónica que desde 2009 había traído a más nuevos vecinos de los que se iban en cada balance semestral.
Ese año el saldo migratorio interior ceutí fue negativo en 499 personas; en 736 al año siguiente y en 389 el posterior. En 2017 se fueron a otras regiones de España 499 ceutíes más de los que siguieron un camino inverso y en 2018 sucedió lo mismo con 706 individuos.
El ciclo ya estan largo como el anterior, que se extendió desde el segundo semestre de 2008 hasta el último de 2013, entonces con saldos positivos continuos de hasta 580, el tope registrado, entre junio y diciembre de 2009.
Las migraciones interiores son solo uno de los tres factores que influye sobre la evolución de la población, que en el caso de Ceuta pasó de 84.829 a 84.434 personas. El saldo vegetativo (la diferencia entre nacimientos y defunciones) inyectó 119 vecinos extra al censo y fueron 57 personas más las que llegaron procedentes del extranjero que las que se fueron a vivir a otro país desde la ciudad autónoma, siempre según los datos del INE.
Los saldos migratorios entre comunidades más positivos durante el primer semestre de 2019 se dieron en la Comunidad Valenciana (1.952), Balears (1.142) y Aragón (837). Por el contrario, Extremadura (–1.283), Andalucía (–1.107) y Castilla y León (–1.034) presentaron los más negativos.
Quienes se mudan desde Ceuta a otra provincia lo hacen sobre todo a Cádiz (264 entre enero y junio del año pasado), Málaga (191) y Madrid (108).
Esas tres regiones son también las que copan los traslados de residencia a la ciudad autónoma: 148 desde Cádiz, 99 desde Málaga y 69 desde Madrid a lo largo de la primera mitad del ejercicio pasado.
En términos de migraciones interiores la ciudad pierde sobre todo hombres (-308) y algo menos mujeres (-262).
El saldo migratorio con el extranjero ha venido siendo positivo en Ceuta casi de forma permanente durante la última década salvo en 2013 y 2014, cuyos cuatro semestres se cerraron con números negativos, y la primera mitad de 2018, periodo durante el que fueron 144 más los empadronados en la ciudad que se fueron a otro país que los que llegaron aquí procedentes de fuera de las fronteras españolas.
La última cifra disponible, la de la primera mitad del año pasado, deja un saldo favorable de 57 personas que se eleva a 70 si solo se atiende a la diferencia de llegadas y salidas de ciudadanos nacidos en Marruecos.
Se trata, en cualquier caso, de números muy por debajo de los registrados en 2010 ó 2011, cuando hubo semestres en los que el saldo favorable rondó las 400 personas y llegó a superar las 300 de ciudadanos del Reino alauita.
Todas las comunidades presentaron saldo migratorio positivo con el exterior en la primera mitad de 2019. Los mayores saldos se dieron en Cataluña (47.119), Comunidad de Madrid (40.539) y la Comunidad Valenciana (27.162). Por el contrario, las comunidades con menores saldos migratorios al margen de Ceuta y Melilla (348) fueron Extremadura (976), La Rioja (1.086) y Cantabria (1.606).
De los 9.396 marroquíes que emigraron de todo el país entre enero y junio de 2019, habían llegado a España en mayor medida entre 2016 y 2017.
Y mas que nos vamos a tener que ir como no cambie algo en esta ciudad....mas paro=salir a buscarse la vida fuera de Ceuta,,,,,,MENOS MARINERA Y MAS SOLUCIONES