La puerta principal de la Santa Iglesia Catedral ha vuelto a vivir la tradicional bendición de animales que, como cada año, se celebra con motivo de la festividad del patrón de Ceuta, San Daniel y compañeros mártires.
Los ladridos de los perros, desde antes de que comenzara el acto, hacía presagiar que este día era diferente a los demás. Es una jornada dedicada a las mascotas y ellos se hicieron notar mientras esperaban el inicio de una tradición que se repite desde hace años a las puertas del templo.
Casi 30 animales, en su mayoría perros, han esperado la bendición de San Daniel, una tradición que para muchos ya es una cita y, en su mayoría, la primera vez para otros.
Al contrario que años atrás en los que algunos ciudadanos también trasladaban a sus gatos para ser bendecidos este día, en esta ocasión tan solo un gato se ha acercado a recibir el agua bendita. Dorito, un hámster de solo tres meses de edad, también se sumaba a esta tradición tan arraigada en la ciudad y que este año ha congregado a más ciudadanos ante las puertas de la Catedral.
Los sones de la banda de música que ha acompañado al patrón de Ceuta durante su procesión, ha despertado el nerviosismo de alguno de los animales allí presentes y sus dueños se han visto obligados a tranquilizarlos hasta que el silencio ha vuelto a adueñarse de las inmediaciones de la Catedral.
Finalmente la recogida del santo en la Catedral daba paso a la bendición y muchos de los allí presentes se acercaron para que su animal recibiera el agua de manos del vicario. Eso sí, con una petición que se ha repetido en todos los casos: “Que sea feliz y viva muchos años con buena salud”. Es la plegaria que los ciudadanos han pedido a San Daniel para gozar de su favor durante todo un año y hasta la cita del próximo año.