La recuperación de los cuerpos de cinco delfines en la tarde del martes pasado, dos en la playa de Benzú y tres en Calamocarro, ha puesto en alerta a las instituciones de la ciudad y al CECAM, Centro de Estudios y Conservación de Animales Marinos. El vicepresidente de la entidad encargada de recoger estos cetáceos, Manuel Vera, analiza toda la situación de cómo se están llevando a cabo las pertinentes investigaciones.
–¿Qué está ocurriendo? ¿Cuáles son los últimos datos con los que se cuenta?
–La tarde del martes fue bastante dramática y tensa. A última hora volvimos a encontrar a otros dos, uno de ellos de casualidad, en la playa de Benzú, dos especies de delfines, igualmente mutilados. Una cría y un adulto. Y bueno, estamos intentando esclarecer un poco a ver qué está pasando. Estamos en contacto con el Ministerio.
–Ya se ha dado aviso al Ministerio de todo esto...
–Efectivamente, estamos en contacto directo con el Ministerio de Medio Ambiente. Nosotros pasamos informes de esto, explicamos la situación y son ellos los que tienen que tomar las medidas oportunas para ver qué es lo que está pasando. Creemos que todo se debe a la pesca del país vecino, evidentemente, por la zona donde están y son todos de la misma especie. Coinciden muchas cosas. Y sabemos que es por la mano del hombre, porque los cortes que tienen son producidos por el hombre, está claro.
–Es una situación grave. Este número supera ya de animales fallecidos en 2018, si no me equivoco.
–Sí, exactamente. Es algo muy inusual. Habría que investigar un poco para ver qué clase de empresas o pesqueros están trabajando por la zona de Tánger, que es la que coincide con los varamientos, porque puede ser que sea un nuevo barco, una nueva empresa que haya por la zona, otro tipo de redes. El caso es que la situación es bastante grave.
"Lo más importante siempre que hay un varamiento es, sobre todo si es un animal vivo, alertar al 112”
–No son delfines que se desorientan, como en otros lugares de nuestro país, y acaban varados en nuestras playas y se les puede ayudar de alguna manera. Llegan con mutilaciones y puñaladas. Están sospechando, evidentemente, que quedan enganchados en redes y la única forma que ven esas personas para sacarlos de ese lío es cortarles a ellos. No quieren ningún desperfecto en sus redes. ¿Es algo así lo que está sucediendo?
–Claro, por lo menos es la posibilidad que manejamos. Cuando los animales se quedan enredados, para evitar romper redes, evitar daños en su material y en su captura, cortarían los que estén enganchados. A la vez, nos hemos encontrado con heridas en vientre, heridas típicas de los ganchos que se utilizan para retirar el pescado de las redes, ha habido otros cortes con arma blanca de grandes dimensiones. Y está claro que no vamos muy desencaminados.
–Ante esta situación, ¿qué se puede hacer? ¿de qué manera podemos colaborar los ciudadanos?
–Lo más importante siempre que hay un varamiento, sobre todo si es un animal vivo, es alertar al 112. Nosotros, una vez que llames al 112, este se pone en contacto con nosotros, con los responsables y nos acercamos al lugar lo antes posible. Lo que hay que hacer es, en la medida de lo posible, siempre, intentar no acosar al animal, no agobiarlo mucho. Si vemos que su vida corre peligro, está bien que se colabore para que el animal no se dé golpes contra rocas hasta, por lo menos, la llegada de miembros del CECAM o algún otro organismo competente.
–¿Y hay alguna manera de hacer que no se desorienten? ¿Cómo deben circular las embarcaciones? ¿Por dónde? ¿Qué hacer si se divisan delfines para molestarles lo más mínimo, en un momento en el que las embarcaciones de recreo salen tanto al mar?
–Sí. De hecho, está estipulado, la legalidad lo ampara. No está permitido acercarse a esos animales, hay que mantener una distancia prudente y no hay que molestarlos nunca. De hecho, si te ven con una embarcación cometiendo alguna irresponsabilidad, molestando a esos animales, te pueden sancionar. Sí es verdad que hay que intentar dejarlos lo más tranquilos posible, que ellos sigan su vida. Normalmente, cuando tú navegas en una embarcación, ellos solos se acercan a jugar con la embarcación y, entonces, puedes disfrutar de ello. No hace falta ir a buscarlos o acosarlos cuando están comiendo o están más tranquilos. También es muy importante mantener una velocidad adecuada y prudente en la navegación. Siempre lo digo: hay que estar pendiente de lo que tenemos delante. Vemos que no es una carretera y pensamos que es el mar, que no hay obstáculos. Y sí, hay obstáculos: tortugas, delfines, muchos animales que, por culpa de colisiones, fallecen.
–Esperamos que se calme todo el tema y que usted también traiga buenas noticias de algún paso que se dé desde el Ministerio, porque me imagino que estarán esperando alguna respuesta de ellos.
–Efectivamente. Esperamos respuestas y órdenes para actuar. Esperemos que las próximas noticias sean buenas. Seguramente llegaremos a buen puerto, ahora que la gente se está concienciando y está todo el mundo echando una mano.