Las oposiciones a Bombero comenzaron ayer sus pruebas con el examen teórico. Se prevé que esta última fase de los exámenes dure varios días, hasta el jueves o el viernes, debido al actual ritmo de las defensas orales del temario.
Estas comenzaron a las cuatro y media de la tarde y se demoraron hasta las diez de la noche, aproximadamente.
Sólo dio tiempo para que once de los 54 aspirantes que habían superado las pruebas físicas llevaran a cabo la segunda parte de la oposición. Este imprevisto se ha debido a dos motivos principalmente. El primero de ellos, la eliminación de dos pruebas físicas que dejaban demasiado al azar y fueron retiradas por petición de los sindicatos. Estas pruebas se sustituyeron por la subida a la escalera de un camión de bomberos y por la subida a la torre de entrenamiento. Esto ha propiciado que el número de aspirantes que llegan a las pruebas de conocimiento sea significativamente mayor que en ocasiones anteriores.
El segundo motivo ha sido la ampliación del temario. Las oposiciones a bombero han aumentado de categoría, y de exigir el graduado en ESO pasan a requerir el título de Bachiller. Eso obliga a que se tengan que desarrollar tres temas, en vez de dos.
La prueba teórica dispone de dos partes. La primera comenzó a las nueve de la mañana en el IES Luis de Camoens, y duró cuatro horas. Los cincuenta y cuatro aspirantes que habían superado las ocho pruebas físicas entraron a las aulas del centro educativo.
Fue allí donde se sortearon los temas a desarrollar, uno de cada uno de los tres grupos. El primero, de aspectos más teóricos; el segundo, de vertiente más técnica; el último, de carácter más práctico.
Entre los catorce temas del grupo I, el tema que tuvieron que desarrollar los futuros bomberos de Ceuta fue ‘El Estatuto de Autonomía de la Ciudad de Ceuta’. En el grupo II, fue ‘Colapsos en edificios’. Y en el grupo III, los aspirantes a miembros del Servicio de Extinción y Salvamento tuvieron que explicar los ‘Tipos y métodos de actuación en los incendios urbanos e industriales’.
Para desarrollar estos temas de manera escrita, los opositores tuvieron un total de cuatro horas, en las que se prohibieron los teléfonos móviles y otros aparatos electrónicos para evitar contacto con el exterior. Después, los opositores tuvieron un descanso hasta las cuatro y media de la tarde, cuando comenzó la parte oral del examen.