Ceuta esconde múltiples tesoros debajo de sus piedras. Son restos arqueológicos protegidos que ayudan a enriquecer la historia de unos antepasados que tenemos la obligación de proteger. Pero hay ocasiones en las que esos tesoros vienen con una coletilla, son únicos, son lo que se dice un referente.
Y con esa coletilla se toparon los encargados de la excavación llevada a cabo en la calle Jáudenes en donde se halló el primer testimonio de la época romana de fabricación de harina de pescado. José Manuel Pérez Rivera ha estudiado la parte de molino giratorio encontrado, un conjunto que data, al menos, del siglo V d.c., aunque podría ser algo anterior. El molino fue encontrado dentro de una pileta de salazones y su presencia podría situarse en la época de la toma vándala de Ceuta.
En Algeciras, en unas excavaciones practicadas hace años en las que participó Darío Bernal, aparecieron molinos de este mismo tipo, pero hasta la excavación desarrollada en Jáudenes no se habían hallado restos similares en Ceuta.
La historia de Ceuta se construye a base de hallazgos como estos en Jáudenes
Podría ser el testimonio de fabricación de harina de pescado, aunque no se descarta que también tuviera que ver con otro tipo de artesanía. Y es que muy cerca de donde fue encontrada la pieza del molino se descubrió un molde, de niveles del siglo III, que se usaba para pasteles y que venía decorado con simbología romana. ¿Tienen ambas piezas alguna relación?, ¿se podría estar ante un lugar de artesanía más allá de la fabricación de harina de pescado? A esas conclusiones no se han llegado, puede ser que el molino se usara para panadería y pastelería y el molde sirviera para alguna especialidad dado lo trabajado de esta pieza y sus características. Como él hay solo 9 ó 10 moldes parecidos que se han encontrado en otras excavaciones hechas en España. En Ceuta es la primera vez.
Para José Manuel Pérez Rivera se trata de piezas importantes, son la primera evidencia arqueológica de que en Ceuta se hacía harina de pescado, son elementos interesantes para reconstruir una parte de la historia de nuestra ciudad que siempre ha estado vinculada al aprovechamiento de los fondos marinos.
Esto tiene una segunda lectura. Cuanto hay encontrado y tapado a propósito, porque este hallazgo se ha realizado simplemente quitando una capa de asfalto y el acerado de una calle, vamos que está a ras de suelo. En su tiempo alguien ya lo vio y calló (del verbo callar).
Los que se dedican a la construcción saben bien cuantos hallazgos se realizan y cuantos se tapan para evitar retrasos en las obras e incluso sus paralizaciones.
Leer Jaudenes, la calle de mi niñez me ilusiona, este hallazgo es algo que trae a la actulidad esta tranquila hilada de edificios paralelos al mar. A seguir en ello, buen trabajoantonio
Gracias Miguel y que interesante. A saber todo lo que hay y como fue nuestra Ceuta en esos tiempos. Una fábrica de harina de pescado. Quien nos diría que estaba y a saber todo lo que habrá, en la calle Jaudenes y otras partes de nuestra Ceuta.