La Ciudad Autónoma ha decidido ponerse más seria con la proliferación de perros potencialmente peligrosos en Ceuta que puedan ser utilizados para participar en peleas u otras actividades ilegales y no solo con intervenciones policiales como la que recientemente permitió la retirada de “un cercado” del Príncipe de cuatro ejemplares.
Actualmente solamente están registrados en el Sistema de Sanidad Animal 340 perros potencialmente peligrosos y solamente 174 propietarios disponen de la licencia preceptiva para tener ese tipo de canes.
En el departamento competente son conscientes, según han reconocido fuentes del Ejecutivo autonómico, que “hay más”, pero “esos son los que están registrados correctamente”.
Algún tipo de rastro queda de otros 794 que han quedado en situación de ‘no activos’, lo que significa que “pueden haber muerto, que los dueños no les han dado de baja o bien que han pasado tres años desde su última vacunación antirrábica y el sistema les ha dado de baja automáticamente”. Ello a pesar de que los propietarios de animales potencialmente peligrosos están “obligados” a comunicar la “venta, traspaso, donación, muerte o cambio de residencia de los mismos y solicitar la correspondiente baja”.
De momento, en paralelo al trabajo policial desde Sanidad Animal han iniciado una campaña de comunicación con los dueños que no tienen licencia para recordarles “que tienen que actualizar la situación de los perros so pena de iniciar expedientes sancionadores”.
La posesión de animales no registrados ni identificados conforme a lo previsto en el Reglamento vigente o por exigencia legal está tipificada como infracción grave y puede ser sancionada con multas de entre 701 y 1.499 euros.
La normativa exige la obtención de una licencia que, por ejemplo, está vetada para personas condenadas por delitos de homicidio, lesiones, torturas, contra la libertad o contra la integridad moral, la libertad sexual y la salud pública o asociación con banda armada o de narcotráfico.
Además, para obtenerla es preciso aportar un informe o certificado de aptitud psicofísica “expedido por centro autorizado de reconocimiento de conductores, de acuerdo con la normativa que los regula” y certificar el haber formalizado un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros con una cobertura no inferior a 120.000 euros.
Se consideran perros potencialmente peligrosos “en todo caso” los ejemplares pertenecientes a siete razas (y sus cruces): Pit Bull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, American Staffordshire, Dogo Argentino, Fila Brasileiro, Tosa Inu y Akita Inu. También “los que hayan sido adiestrados para el ataque o guarda y defensa” y, aunque no se encuentren entre los anteriores, “todos aquellos que manifiesten un carácter marcadamente agresivo y hayan sido objeto de, al menos, una denuncia por dicha circunstancia o que hayan protagonizado agresiones a personas o ataques a otros animales”.
Siempre con bozal y correa que no sea extensible
Para la circulación en espacios públicos de perros potencialmente peligrosos es obligatoria la utilización de cadena o correa no extensible de menos de dos metros de longitud máxima. No se puede llevar más de uno por persona y siempre con “bozal homologado y adecuado para su raza”. En parques y jardines públicos, así como, en las inmediaciones lugares de ocio y esparcimiento de menores de edad su presencia está totalmente ”prohibida”.
La raza de los pastores belga malinois, la última ‘moda’ para las peleas
Más allá de las siete razas que en todos los casos y para todos los ejemplares y sus cruces se consideran potencialmente peligrosas, el Sistema de Sanidad Animal y la Policía Local se está encontrando con un número creciente de pastores belga malinois, que parecen haberse convertido en la última moda entre los aficionados a un determinado perfil de canes.
“Es una raza que no requiere licencia ni esta declarada como potencialmente peligrosa pero que se está usando en las peleas de perros como ‘sparring’ porque es hiperactivo y si se le adiestra para morder lo hace con mucha facilidad”, han indicado las fuentes consultadas en la Ciudad. “Además por características como la cruz, el peso y las mandíbulas tendría que entrar en esta clasificación, pero no está considerada oficialmente y es la raza que se ha puesto de moda para todo el mundillo de las peleas, como ha certificado la Policía Local en sus redadas”, han añadido.
Otro “problema” es que cierto “rechazo social” a las razas catalogadas como potencialmente peligrosas está multiplicando su número en la Protectora sin encontrar adoptantes.
Limitaciones en zonas públicas y también en espacios privados
La circulación de perros potencialmente peligrosos en espacios públicos está limitada pero en los locales o viviendas que los alberguen también es obligatorio reunir “medidas de seguridad necesarias”. A tal efecto, deben estar debidamente señalizados “mediante un cartel bien visible en todos sus accesos con la advertencia de que se alberga un animal potencialmente peligroso indicando la especie y raza del mismo”.
La pérdida o sustracción de uno de estos animales debe ser denunciada por su titular en el plazo máximo de 24 horas desde que tenga conocimiento de los hechos.
El transporte debe hacerse “adoptando las precauciones que las circunstancias aconsejen para garantizar la seguridad de las personas, bienes y otros animales”.
Y los que no estan registrados, de cuantas patas son?
La protectora los pasea sin bozal y se los dejan a cualquier voluntario que aparezca por ahí sólo tenéis que subir por las tardes y lo vereis
Subiros al Príncipe y vereis cuantos hay sin documentaciones y campando a sus anchas