La Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) espera que las decisiones que se tomen en la futura mesa del diálogo social “se lleven a cabo”. Así lo dijo ayer el presidente de la organización empresarial, Rafael Montero, quien mostró su agrado por la intención del Gobierno local. “Si está el Gobierno, los agentes sociales y la oposición no creo que vaya haber problema alguno para que cualquiera de las medidas de reactivación económica se ponga en marcha”, explicó Montero.
En esta línea, el portavoz de los empresarios ceutíes espera que a cualquier medida que se tome en este foro “se le de la celeridad que entendemos que debe tener”.
Para el líder de la CECE, la presencia de la oposición en este nuevo foro para encontrar el camino del desarrollo económico de la ciudad autónoma es una buena noticia para un órgano que considera “muy necesario, se llame como se llame”.
Un aspecto que valora Montero del nuevo foro es la presencia de la oposición. “Cuando la pasada semana se nos llama, convocados por el consejero Guillermo Martínez, comprobamos que en esa mesa además de sentarse el Gobierno, centrales sindicales mayoritarias y empresarios, lo que quizá más nos agradó es que también estaba sentada toda la oposición. Entonces entendimos que era una mesa infinitamente válida para tomar decisiones de calado”, manifestó.
Para restablecer el diálogo social con empresarios, sindicatos y oposición, el Gobierno de la Ciudad elaborará un estudio estratégico con las bases para el desarrollo económico.
Dicho órgano se reunirá periódicamente para que los grupos que lo componen presenten propuestas para reactivar la economía en la ciudad autónoma. El Gobierno se muestra abierto a las aportaciones y al enriquecimiento de las propuestas que contendrán ese documento de bases y ejes que pondrá encima de la mesa para definir, finalmente con todos los miembros de este foro del diálogo social, la estrategia de desarrollo de Ceuta.
En la actualidad, un grupo de trabajo ya analiza las 43 medidas aprobadas por la Asamblea el pasado 25 de diciembre. En la última reunión, el pasado miércoles, se debatió el punto número 15, referente a impulsar la responsabilidad social de las empresas. UGT propuso establecer una línea de ayudas reintegrables para empresas de sectores estratégicos que tengan que ver con el futuro económico de la ciudad autónoma.
Por otra parte, Montero habló de la conferencia de Joaquín Aranda y recordó que lo que decía en relación al sector privado frente a la crisis y la escasez del sector industrial coincidía con “lo que lleva diciendo la Confederación de Empresarios hace cinco años”.