Son tortugas verdes, ejemplares que tienen su hábitat natural en el Pacífico y el Atlántico, por lo que se han convertido en toda una rareza en aguas ceutíes. Sin embargo en apenas 15 días se rescataron dos ejemplares atrapados en las redes de la almadraba. El primero de ellos, una hembra, y una semana más tarde, un macho, que se han recuperado en las dependencias del CECAM, Centro de Estudios y Conservación de Animales Marinos, hasta su suelta en el mar.
El descubrimiento trajo a la ciudad a varios expertos del Oceanogràfic de Valencia, con el objetivo de instalar un localizador vía satélite a ambos ejemplares. El dispositivo servirá para hacer un seguimiento de estos animales durante un periodo que rondará el año. “Dado lo inusual que es el tener dos tortugas adultas de esta especie en esta zona del litoral, queremos entender el fenómeno que las ha traído hasta aquí, seguir sus pasos y ver qué hacen”, explicó el responsable del área de Conservación del Oceanogràfic de Valencia, José Luis Crespo.
Una vez puestos en libertad, los dispositivos aportarán a los expertos nuevos datos sobre la especie. “Sabremos la posición de los animales, cómo emplean el hábitat o la velocidad del movimiento, además de la ecología de la especie”, apunta Crespo.
Un chequeo completo para comprobar el estado de salud de ambos y conocer si hubo actividad reproductora este año o podría haberla el próximo, dio como resultado una grata sorpresa, tanto para los expertos del Oceanogràfic como para los voluntarios del CECAM: la hembra se encuentra en estado de gestación. Una buena noticia que arroja un halo de esperanza para esta especie en riesgo, especialmente en zonas del Mediterráneo. “Si se acercaran a las costas españolas a desovar sería algo muy importante a tener en cuenta y que habría que proteger”.
Tras una mañana de intenso trabajo y con las garantías de que durante cierto periodo de tiempo los expertos del Oceanogràfic seguirán todos sus pasos, el CECAM procedió a la suelta de las tortugas.