Las buenas relaciones del gobierno de la Ciudad con la Federación de Fútbol de Ceuta y en concreto con su presidente, Antonio García Gaona, le están resultando muy 'caras'.
Los partidos de la oposición, en los últimos días Caballas y PSOE, se han pronunciado directa o indirectamente contra la FFCE, el primero por la gestión del 'Alfonso Murube' y el segundo al posicionarse claramente en favor de José Antonio Muñoz, presidente de la AD Ceuta, y su guerra particular contra el propio Gaona.
En algunos casos, si no en todos, se mezclan guerras e intereses personales con el verdadero fin de una entidad federativa del poder de la de fútbol, que no es otro que el del fomentar el fútbol base fundamentalmente.
Hasta tal punto se buscan las 'cosquillas', que el PSOE pide a la Ciudad que hable de las cuentas respecto a unos campeonatos nacionales de fútbol-sala benjamín y alevín que fueron un éxito rotundo, en marzo, tanto desde el punto de vista deportivo como turístico, con cientos de jugadores y familiares que durante una semana se gastaron sus buenos 'dineros' en Ceuta.
Un campeonato que, no hay que olvidar, por su organización se ha ganado el reconocimiento por parte de la Federación Española.
Está bien el criticar y el cuestionar, pero marquemos unos límites y no carguemos incluso contra lo que está funcionando.
La Federación de Fútbol, no cabe duda, está protegida bajo el paraguas del Gobierno, y todo lo que suene a tal hace que la oposición se ponga el cuchillo en la boca.
¿Conclusión? Sacar tajada. Unos y otros. Los que queremos disfrutar del fútbol, tanto mayores como pequeños, pasamos a un segundo plano. Preocupante.