No, no es mía la frase. Es de un gran aficionado al fútbol, seguidor incondicional de la UD Melilla casi desde que naciera y, además, de esos que disfrutan de lo lindo cuando el titular melillense logra resultados positivos y, cuando ocurre lo contrario –como está sucediendo ahora– lo pasa bastante mal. “Roldán –me decía el lunes–, otro resultado negativo, y van cinco consecutivos… Esto huele a muerto”.
Lo que todavía no acabo de entender el por qué de la marcha de García Téba, y tampoco la “limpieza” llevada a cabo en la plantilla después de, por segundo año consecutivo, con García Tébar como director de orquesta, clasificar al equipo para participar en la fase de ascenso… Unos jugadores perfectamente acoplados para cualquier formación que decidiera su técnico, practicando buen fútbol y cosechando esos resultados positivos que valieron al final participar en dicha fase valedera para optar a categoría superior.
Decía Chiqui González el lunes, comentando a Paco Benítez en TV Melilla, el nuevo traspiés de la UD Melilla ante el Lucena en el 'Álvarez Claro' que, la bronca acompañada de pitada del público al final del encuentro no “iba dirigida a los jugadores ni a sus técnicos y auxiliares. Era la expresión del malestar al resultado adverso”. O sea… a lo que reflejaba el marcador; y a mi me dio la risa porque culpamos a los marcadores de la trayectoria, hasta ahora, del conjunto melillense –más nefasta imposible– y el entrenador diciendo, cada víspera de partido, “hoy nos toca ganar”. Pues, caballero, como no se gane pronto un encuentro y el panorama cambie, yo, con toda sinceridad, veo la situación bastante jodida.
Yo no he visto jugar a la UD Melilla en lo que va de temporada por circunstancias que no me lo han permitido. Me dicen quienes lo han visto en el 'Álvarez Claro' que se desenvuelve bastante bien moviendo la pelota; eso que ahora está de moda del “toque-toque” (¡valiente gilipollada…!). ¿Y qué? ¿Sirve de algo? La realidad es que aún no ha ganado un solo encuentro de los cuatro disputados de liga y, en el de Copa, en el primer asalto, a la cuneta.
Hay quienes opinan que el equipo en su mayoría es casi nuevo, y nuevo es también el entrenador, por lo que hay que darle tiempo al tiempo y más que nada, confianza en la seguridad de que pronto saldrá de donde está. Sin embargo yo sigo dando vueltas a la cabeza del porqué de la marcha de García Tébar y de jugadores que dieron un magnífico resultado, para confeccionar una plantilla casi nueva, que en defensa ha encajado ya seis goles en cuatro partidos de liga, aparte del de Copa y, en ataque, solamente ha hecho una diana. O sea, para resumir, que la cosa no carbura. ¿Echamos la culpa al marcador amigo Chiqui…?.
Y el domingo próximo se juega ante el Écija que en la jornada última empató con el Almería B en campo almeriense. Un cuadro ecijano que ha ganado un encuentro, empatado dos y perdido uno.
¿Tocará ganar allí Sr. Óscar Cano?