La Estación Depuradora de Aguas Residuales de Ceuta, se pondrá en marcha este mismo mes, tal y como han confirmado desde la empresa que gestiona su funcionamiento, Acuasur. Hacía tiempo que al final de sus obras se unía un problema de carácter eléctrico que debía resolverse para que el proyecto que supondrá para Ceuta cumplir con la normativa europea sobre la depuración de aguas, se hiciera realidad.
Será a lo largo de este mes cuando se permita ya el paso de la electricidad, lo que supondrá que se inicie el bombeo de todo el agua que le llegue. Posteriormente, cuando los técnicos comprueben pasados unos días que todo funciona correctamente, su puesta en marcha será inminente. Se resolverán entonces las deficiencias que la ciudad de Ceuta presenta en la actualidad en su red de saneamiento y depuración de las aguas residuales que actualmente se vierten al mar sin depurar, dando servicio a una población futura de casi 200.000 habitantes.
Uno de los problemas a tener en cuenta es la eliminación de los fangos que se acumularán con la producción de la planta y que los mismos, de momento, deberán ser llevados por vía marítima a la Península. Según los acuerdos que existen desde el inicio de la obra, a partir de la puesta en marcha de la EDAR, durante los dos primeros ejercicios, ese traslado estará subvencionado por el propio Estado. Sin embargo, a partir del tercer año el coste será para el Gobierno autonómico. Con lo cual la posibilidad más cercana que existe es la construcción de una planta de fangos adherida a la propia EDAR para que ese tratamiento se haga aquí. El coste de la citada planta al final merecería la pena porque terminaría por sufragarse a sí misma, sin necesidad de tener que llevar los fangos a la Península. Según los cálculos que están establecidos por los responsables y entendidos el coste anual de los fangos a la Península, estaría alrededor de los dos millones de euros que, según las cifras que se manejan sería el coste de la construcción de una planta que solucionara el problema.