La redacción de un plan de prevención de suicidio ha sido un punto de acuerdo común entre las distintas fuerzas políticas en la sesión plenaria de este jueves. Después de mostrar su inquietud por esta cuestión y de señalar posibles factores, la solicitud ha sido aprobada con 19 votos y 4 abstenciones.
El planteamiento de Ceuta Ya! busca tratar esta situación con un programa oficial a nivel local más allá de los servicios que se ofrecen por parte de asociaciones relacionadas con la salud mental. Julia Ferreras, diputada de la formación, ha recalcado como necesario descargar a estas entidades de esta “responsabilidad” que corresponde a la Administración pública.
Factores y asociaciones
Ferreras ha enumerado los factores que influyen como la dificultad de acceso a la vivienda o la falta de empleo. Ha hecho hincapié en que esta realidad no tiene siempre vínculo con trastornos mentales y que actualmente en muchos casos se trata de paliar a base de fármacos. “Se están medicando los problemas sociales”, ha mencionado. “Se está poniendo un parche”.
Estas dos cuestiones, las organizaciones ceutíes dedicadas a estos asuntos y el mayor consumo de ansiolíticos o productos similares, han sido también sacadas a la palestra por Nadia Mohamed de MDyC, que ha votado en pro a esta petición. “La sociedad va muy por delante de la administración. Ha llegado demasiado tarde”, ha comentado, en relación con la labor de las asociaciones.
Ha recordado la aprobación de una unidad infanto-juvenil que fue “objeto de interpelaciones”. Ha trasladado que desde el partido ya han exigido a Ingesa que priorice esta cuestión respecto a la partida presupuestaria dirigida a Ceuta para sanidad.
Guía de salud mental
Nabila Benzina, consejera de Sanidad, ha recordado las cláusulas dentro de la guía elaborada por la Ciudad relativa a la salud mental. “Nos reunimos y os planteamos este documento acerca de los recursos en este ámbito. Tengo el borrador”, ha mencionado.
Los ámbitos de actuación son tres. La primera vigilar las conductas y comportamientos que sean de alarma. Lo segundo, formar a profesionales de distintos terrenos para que logren detectar estos casos, así como a saber cómo manejarlos en caso de que tengan que abordarlos. La última línea es coordinar a todas las instituciones para facilitar esta tarea de prevención.
Medios de comunicación
El suicidio hace años no estaba en el escaparate de los medios de comunicación. Este tema ha sido sacado a la palestra por Benzina y Ferreras. Ambas coinciden en la necesidad de romper el silencio y de que los medios den el paso de crear un diálogo sobre ello. “Hay que abordarlo a través de los medios”, ha aseverado la consejera de Sanidad.
“Es importante hablar del suicidio”, ha añadido Ferreras, quien ha recalcado que existe un “consenso extendido de la necesidad de conversar sobre el suicidio”. “Es la mejor manera”, ha mencionado. “Así, la persona con esta conducta deja de sentirse un bicho raro”, ha concluido.
Medida necesaria e imprescindible. Ahora sólo falta que los proponentes aprendan a relacionarse con las personas que sufren enfermedades de salud mental que en muchos casos llevan al suicidio y no se dediquen a marginarlos por opinar de forma distinta.