Ante la pregunta planteada por el magistrado del Juzgado de lo Penal número dos de si deseaba declarar o por el contrario prefería acogerse a su derecho de no hacerlo, tanto acusado como testigo, su esposa, decidieron elegir la última opción, la del legítimo silencio, lo que motivó que, en consecuencia, U.M.M. quedara absuelto del cargo que se le imputaba, un delito de maltrato, en base al principio ‘in dubio pro reo’.
En el mismo momento en que el magistrado se pronunció, el hombre quedó en libertad, ya con el juicio celebrado y la sentencia absolutoria bajo el brazo, después de que fuera denunciado el 15 de septiembre pasado por su suegra, la madre de su pareja, decisión que la señora adoptó tras, según mantuvo en su declaración de septiembre, escuchar ruidos, gritos y sollozos proferidos por su hija y que venían de la casa contigua a la suya, la de susodicha pareja.
Ante tal situación, acaecida en la noche del 14 de septiembre, la madre de la mujer del acusado supuso que su hija estaba siendo agredida, maltratada e insultada por su propio marido, de ahí que decidiera acudir a dependencias policiales en la mañana del día siguiente en pos de poner una denuncia a su yerno.No obstante, y ante tal situación, la hija de la denunciante argumentó, en favor de su marido, que sólo se trataba de una discusión normal y corriente, actitud que, de cierta manera, continuó en el juicio de ayer ya que, no declarando en contra de su pareja, evitaba que ésta fuera condenada por un delito de maltrato que no fue tal.
Cárcel para una mujer con hachís
Por otra parte, en un juicio celebrado en la sala de lo Penal número dos, una mujer, cuyas iniciales responden a las letras M.E., fue condenada a tres años y dos meses de prisión y al pago de 16.564 euros en concepto de multa por cometer un delito contra la salud pública, después de que intentara, sin éxito, trasportar droga –concretamente hachís– hacia la península, en el mes de septiembre pasado. La mujer, de origen marroquí, se conformó con la pena y no objetó nada a la pena impuesta, que también contemplaba el comiso del vehículo en que viajaba.