Las altas temperaturas de este verano 2024 han causado la muerte de dos vecinos de Ceuta. Se trata de un hombre y una mujer con edades de más de 65 años y más de 85 (no se especifica quien tiene cada edad).
Así se recoge en la estadística del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) sobre monitorización de la mortalidad diaria (MoMo).
Un fallecimiento se produjo en el mes de julio y el otro en agosto, y ambos se encuadran en la lista de muertes que son atribuidas a las altas temperaturas.
No han trascendido más datos sobre estas muertes, enmarcadas en la estadística que se publica de manera oficial sobre la mortalidad atribuida a picos de calor.
Precisamente porque suceden este tipo de muertes, el Ministerio de Sanidad difunde consejos y recomendaciones. Así, el propio Ministerio recordaba a principios de verano que la exposición a temperaturas ambientales elevadas puede provocar una respuesta insuficiente del sistema termorregulador humano.
Los consejos de Sanidad
Además, el calor excesivo puede alterar las funciones vitales si el cuerpo humano no es capaz de compensar las variaciones de la temperatura corporal.
De hecho, desde un enfoque biológico, la exposición a temperaturas excesivas puede provocar problemas de salud como calambres, deshidratación, insolación o golpe de calor (el cual cursa con problemas multiorgánicos que pueden incluir síntomas tales como inestabilidad en la marcha, convulsiones, coma e incluso la muerte).
Sanidad aconseja beber agua o líquidos con frecuencia, aunque no se sienta sed y con independencia de la actividad física que se realice. Además, se deben evitar las bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas, ya que pueden favorecer la deshidratación.
También aconseja permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, y refrescarse cada vez que se necesite. Además, se debe procurar reducir la actividad física y evitar practicar deportes al aire libre en las horas centrales del día, así como usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar.