Tras la noticia de hace una semana sobre la liberación de 6 marroquíes a manos de bandas dedicadas a la trata de persona, la Asociación marroquí de víctimas de personas secuestradas ha anunciado que la operación para liberar a 25 ciudadanos marroquíes y a un ciudadano de Yemen de los campos de detención localizados en Myanmar ha sido un éxito.
Esta operación se enmarca en los intensos esfuerzos de las autoridades marroquíes, encabezadas por Mohammed VI, que brindó su apoyo y orientación para conseguir que las partes intervinientes cumplieran con su deber tras el abonado económico para su rescate.
En un comunicado oficial, el Comité de Familiares de las Víctimas expresó “mostramos desde aquí nuestro agradecimiento al Rey Mohammed VI por la especial atención y cercanía que ha prestado al expediente de nuestros hijos, dando sus órdenes y directivas a los distintos participantes para cumplir el deber nacional hacia los ciudadanos y ciudadanas marroquíes que fueron víctimas de la trata internacional de personas”.
El comité explicó que las víctimas liberadas recibirán atención sanitaria y psicológica a su regreso a Marruecos, y subrayó la necesidad de proporcionarles una atención médica acorde tras haber pasado este hecho traumático para garantizar su plena recuperación de las difíciles experiencias que vivieron.
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de Marruecos confirmó que las víctimas no viajaron a Tailandia como turistas, sino que fueron atraídas por empresas que operan a ambos lados de la frontera entre Myanmar y Tailandia, que se dedican a engañar y defraudar vía online, informó el Ministerio.
Estafa y casos precedentes
También informaron desde el ministerio que el proceso de contratación en este tipo de casos se realiza a través de empresas que ofrecen atractivas ofertas laborales en el exterior, pero una vez allí, se encuentran con una realidad completamente distinta a esas promesas, pues son explotadas en distintas actividades ilegales.
No se trata de un caso aislado, de hecho, esta situación la enfrentan decenas de marroquíes, cuyo número estimado se encuentra entre 150 y 200, según las declaraciones de los familiares, que afirman que los afectados son sometidos a diversos tipos de tortura en el lugar donde los retienen de Myanmar, mientras las bandas exigen el pago inmediato para negociar su liberación.