El presidente y portavoz de Vox en la Asamblea, Juan Sergio Redondo, ha recordado que su partido ya había llevado en dos ocasiones al Pleno la necesidad de emancipar a la Ciudad del “pufo” que para la economía de la administración local suponía la adjudicación a Trace (con un coste per cápita que ya rozaba los 300 euros en 2022) y que según ha deslizado se convirtió en “el mayor chiringuito de colocación” por parte de “sindicalistas metidos a políticos”.
“Nuestras propuestas no diferían en absoluto de lo que hoy vamos a aprobar, como el proceso desarrollado en Málaga, donde se ha conseguido un ahorro sustancial para las arcas públicas”, ha contextualizado las consecuencias de la “liberación” de la Ciudad de grupos empresariales “muy bien representados en esta Asamblea”.
Redondo ha lamentado la “mofa” y el “escarnio” con el que diputados como la ahora delegada del Gobierno, Cristina Pérez, “defendió los intereses de la empresa, no del PSOE”.
El dirigente ultraderechista ha valorado que haya habido trabajadores en la UTE que han aportado “mucho” al cambio del modelo de gestión del servicio de limpieza pública, mérito que ha achacado explícitamente a su sindicato, Solidaridad, que cuenta con una exigua representación en el Comité de Empresa.
“Este proceso no puede ser algo estático e inamovible: la sociedad resultante debe enfrentarse a retos como la integración de la planta de transferencia del monte Hacho [cuya licitación todavía no se ha materializado y que sigue gestionando Urbaser] y de los operarios que trabajan para la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV), las Brigadas Verdes”, ha apuntado.
Para terminar el portavoz de Vox en la Cámara autonómica ha criticado que la municipalización se vaya a materializar “con dos años de retraso”. “Bien está lo que bien acaba”, ha concluido su intervención desde el atril para fijar la posición de su partido con respecto a este asunto.