Nuevo anuncio. Tendremos sede judicial dentro de tres meses en el antiguo Banco de España. Es lo que nos cuentan, aunque se haya convertido en la obra más secreta y oscura de todas. El ocultismo ha sido tal que ni siquiera los sindicatos han sido llamados a comprobar qué se está haciendo y de qué manera, apostándose por la adaptación de unas dependencias que van a provocar problemas porque no reúnen las condiciones para la celebración de juicios por sus dimensiones. Pero esto suele ocurrir cuando se mira por encima del hombro a quienes saben y cuando se dirige un área desde la Península sin tener idea de lo que pasa en Ceuta.
Mirar en la hemeroteca supone encontrar decenas de artículos con diferentes fechas de inauguración. Nada se cumplió. Como tampoco la atención a la transparencia que iba a rodear estas actuaciones, poniéndose sobre la mesa todo lo que se iba a hacer para, al menos, generar un oportuno debate. Nadie quita autoridad al Ministerio y a su Gerencia sobre el proyecto de entidad judicial que pretenden llevar a cabo, pero se tiene que tener más afinidad con los que saben qué hace falta para aparcar la soberbia y disponer una obra más adecuada a lo realmente necesario. Y me da que con la remodelación del Banco de España se han cometido muchos errores que irán aflorando poco a poco. Serán las sorpresas de una obra secreta.
Con Justicia pasa lo mismo que en Educación. Áreas de tanto paso no pueden ser sometidas a criterios de ministerios que poco se implican con lo que pasa en Ceuta a pesar de que les llegan noticias de todo lo malo, que es mucho, así como de las abundantes incidencias que ponen en riesgo el buen desempeño de la actividad judicial. Hace tiempo que se tendría que haber replanteado una descentralización acorde a la importancia de áreas de peso que no pueden funcionar con esta absoluta dependencia que supone una traba para su buen desarrollo.
Nada se ha hecho por desatascar asuntos o por atender a los que saben para evitar problemas venideros. Dentro de tres meses veremos si, por fin, hay traslados y de qué manera tiene lugar el reparto de áreas y el posterior funcionamiento de las mismas. Es triste que se tenga que ir detrás de quienes son meros servidores que olvidaron a quién se debían.