Basándose en la llave de la antigua cancela del Ayuntamiento se trabajó sobre un modelo impreso a ordenador que se fusionó manualmente pieza a pieza en oro macizo
La tarea de elaborar una llave de la Ciudad no fue nada fácil, sobre todo porque no existía un modelo previo en el que basarse. Joyería Blanco tuvo que elaborar la primera llave de la Ciudad, y la única que hasta el momento existe. Basándose en la llave de la antigua cancela del Ayuntamiento se trabajó sobre un modelo impreso a ordenador que se fusionó manualmente pieza a pieza en oro macizo.
Como detalles internos, la llave que se entregó a Sus Majestades en la visita real incorpora en el nexo de unión de las piezas un escudo de la Ciudad, y justo en el extremo de una de las muescas un sello del taller que lo elaboró, es decir, de Joyería Blanco. “Dudamos mucho, en principio decidimos no poner nuestro nombre, pero a última hora cambiamos de opinión. Había sido un gran trabajo y quedaría guardado para siempre en Patrimonio Nacional”, explica Rosa Blanco. “Desconocemos dónde se encuentra, pero alguna vez nos surge la curiosidad”.