M. A. CEUTAAgentes de la Policía Nacional han detenido a uno de los dos atracadores presuntamente relacionados con el robo perpetrado el pasado 26 de agosto en un comercio de la calle Real. El ceutí M.P.M. está imputado por su presunta relación con un robo con violencia y queda por detener al otro joven que le acompañó aquella noche para amedrentar y atracar a los comerciantes chinos que regentan este local. La grabación aportada por un comercio situado al lado de la tienda ha servido de base para que la Policía haya dado con el primer detenido y tenga identificado al segundo.Según ha explicado la Jefatura Superior en una nota de prensa, los atracadores aprovecharon que el comercio estaba abierto para, en torno a las 23.30 horas de ese 26 de agosto, introducirse en el local y arremeter con el dinero que había en caja, unos 800 euros. La pareja, tal y como publicó El Faro un día después de los hechos, se acercó al comercio vestida con ropa deportiva de color oscura y capucha, portando además bragas del mismo color con las que tapaban parcialmente el rostro.Para intimidar a los comerciantes, uno de ellos hizo uso de un arma blanca, mientras que el otro mostró una pistola; dos armas que usaron para amedrentar a las víctimas quitándoles los 600 euros recaudados además de un teléfono móvil Iphone y un Ipad.Cuando pretendían salir del local, uno de los comerciantes dio alcance a un atracador y forcejeó con él, logrando quitarle la prenda con la que tapaba su rostro. No obstante, no fue veto suficiente ya que los autores del robo con violencia consiguieran escapar del lugar.Emprendieron la huida uno por cada lado, llegando a saltar por los tejados de algunas viviendas bajas que se ubican cerca del comercio, por la calle Machado; dato que hizo significar que no eran de la zona centro ya que se despistaron en la huida.Con lo que no contaban los delincuentes era con la presencia de una cámara de seguridad de un comercio cercano. Algo que fue clave para identificar a los maleantes. Esa cámara, que ha sido examinada por policías de la UDEV (Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta), muestra cómo los dos atracadores se detienen delante del escaparate del comercio y uno de ellos se coloca un pasamontañas en la cabeza, saca una pistola, la monta y la vuelve a guardar en su bolsillo. Poco después emprende camino junto a su compañero hacia el comercio para perpetrar el atraco.Esas imágenes son importantes, ya que muestran a los autores antes de cometer el robo y se visiona cómo uno de ellos lleva una pistola y llega a montarla para su uso. Vistas las imágenes, los dueños del local han conseguido identificar plenamente a sus agresores.Aquel suceso fue un mal trago para sus víctimas, que recordaban a El Faro cómo, en ese instante, solo “pensamos en nuestras vidas, que es lo más importante y tiene más valor que el dinero que se llevaron”, explicaban.Hace un año aproximadamente, el mismo comercio sufrió otro robo. En aquella ocasión el supermercado estaba cerrado y tuvieron que forzar la puerta para acceder al botín y la caja registradora nueva que tenían. En la zona centro se han sucedido varios atracos más, habiéndose esclarecido algunos de ellos. Se detuvo de hecho a un marroquí por 16.
Segundo atraco violento esclarecido
A falta de la detención del compinche en el atraco a este comercio de la calle Real, el arresto del primer implicado se encuadra en la lista de sucesos esclarecidos en los últimos días. Esta misma semana la Policía Local, a través de los agentes del Grupo III, detenía a M.R.H.M., implicado en el atraco a otro comerciante chino, esta vez en Hadú. Ya en prisión, condenado a 3 años y seis meses, se ha podido demostrar su relación directa con este atraco, para el que hizo uso de dos armas de fogueo. La Policía trataba de esclarecer si el detenido tenía algo que ver con otros atracos, pero finalmente se le ha relacionado solo con éste. Los robos con violencia, con uso o no de pistolas, han aumentado considerablemente; en las últimas semanas los ha habido en las naves del Tarajal, en el Príncipe y en otro local de Juan Carlos I-Rosales.