Para Juan González Serrano, el pasado 28 de octubre se convirtió en un auténtico calvario, después de esperar durante casi siete horas en urgencias del hospital universitario la confirmación de una prueba a la que había sido sometido a principios de la mañana, y que, al parecer, por un error dicha prueba no había sido diagnosticada.
A las 10.30 Juan González ingresa en urgencias con síntomas de padecer una isquemia, los mismos que sufrió una semana antes y por los cuales también fue tratado en urgencias.
Tras realizar las pertinentes pruebas de analítica, cardiograma y TAC, los problemas comenzaron cuando esta última “aparece en blanco”, según apunta el afectado que se vio obligado a continuar ingresado, sin poder siquiera recibir su tratamiento por la diabetes que padece. “Además de la pastilla que debo tomar también tengo que hacer un horario de comidas, ya eran las dos de la tarde y nadie me hacía caso”.
Dos horas más tarde, sobre las cuatro, y después de “reclamar mis derechos”, el paciente asegura que fue “invitado” a abandonar urgencias “incluso con una vía puesta”. Ya en Admisión de pacientes continuó reclamando los resultados del TAC, “llegó una doctora y volvieron a decirme que la prueba había salido en blanco”.
Numerosas quejas y reclamaciones después, el personal de urgencias constató que el radiólogo encargado de efectuar la prueba había concluido su turno sin realizar el pertinente diagnóstico, que tampoco efectuó su sustituto. “¿Cómo es posible que un radiólogo de guardia diga que la prueba está en blanco y ni siquiera mira el informe? ¿Es que no está capacitado para diagnosticar?”, se pregunta el afectado.
Aunque afortunadamente el diagnóstico final fue positivo para el pacientes, ahora a Juan González tan solo le queda plantearse una denuncia al Ingesa ante los hechos ocurridos hace una semana, aunque se muestra pesimista ante el resultado de una demanda. “Con el corporativismo que hay ¿para qué sirve? Si el único derecho que nos queda a los pacientes es el del pataleo y no se va a solucionar nada”, se lamenta.