Una persona efectuó ayer al menos un disparo en la barriada Juan Carlos I, junto al cuartel. Según vecinos, podría tratarse de un motorista. Nada más ocurrir los hechos, sobre las siete de la tarde, agentes del Cuerpo Nacional de Policía acudieron en varios zetas a inspeccionar la zona y buscar en ella si hubiese caído algún casquillo que ayudara a la investigación para detener al autor del disparo.
Al parecer, los agentes, algunos de paisano, se marcharon de la zona sin recoger casquillo alguno, por lo que se podría haber utilizado un revólver. Lo que sí está claro es que no hubo heridos.
La Policía estuvo alrededor de una hora buscando casquillos por la calzada, por unos matorrales situados en la acera e incluso levantaron varias alcantarillas para buscar.
Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía preguntaron también a los vecinos de la zona si habían visto algo, así como a los militares que se encontraban en la puerta del acuartelamiento.
Decenas de vecinos y curiosos se colocaban por la zona para saber qué había ocurrido. Algunos decían haber escuchado un disparo, otros decían que no sabían nada.
No es la primera vez que la Policía investiga unos hechos similares. Sin ir más lejos, la pasada semana el aviso de un ciudadano que manifestaba haber visto a varios individuos en la zona de Arcos Quebrados haciendo prácticas de tiro motivó que la Policía Nacional montara un dispositivo para intentar localizar a los supuestos participantes. Finalmente el resultado fue negativo, ya que cuando los agentes acudieron al lugar no pudieron sorprender ni a los actuantes ni al hombre que había alertado de esta situación, algo que suele ocurrir en estos casos.
Al parecer, los agentes, algunos de paisano, se marcharon de la zona sin recoger casquillo alguno, por lo que se podría haber utilizado un revólver. Lo que sí está claro es que no hubo heridos.
La Policía estuvo alrededor de una hora buscando casquillos por la calzada, por unos matorrales situados en la acera e incluso levantaron varias alcantarillas para buscar.
Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía preguntaron también a los vecinos de la zona si habían visto algo, así como a los militares que se encontraban en la puerta del acuartelamiento.
Decenas de vecinos y curiosos se colocaban por la zona para saber qué había ocurrido. Algunos decían haber escuchado un disparo, otros decían que no sabían nada.
No es la primera vez que la Policía investiga unos hechos similares. Sin ir más lejos, la pasada semana el aviso de un ciudadano que manifestaba haber visto a varios individuos en la zona de Arcos Quebrados haciendo prácticas de tiro motivó que la Policía Nacional montara un dispositivo para intentar localizar a los supuestos participantes. Finalmente el resultado fue negativo, ya que cuando los agentes acudieron al lugar no pudieron sorprender ni a los actuantes ni al hombre que había alertado de esta situación, algo que suele ocurrir en estos casos.
¿Demostración de que existe más gente con armas?
El disparo efectuado en la tarde de ayer en la barriada Juan Carlos I podría ser un acto para demostrar que a pesar de que se ha detenido a los tres presuntos autores materiales de la muerte de Karim Mohamed aún hay gente con armas, según apuntaron a este medio fuentes policiales.
Es una posibilidad que barajan los agentes, que trabajan desde ayer para conocer quién fue el autor del disparo que dejó intranquila a buena parte de los vecinos de la zona de esta barriada en que se produjo el hecho.