Los individuos se llevaron la recaudación que había en la caja, entre 3.000 y 4.000 euros, según cálculos del responsable del local
Destacó que los autores iban “preparados”, con guantes y “sabían dónde estaba todo”
En apenas 40 segundos tres individuos que ocultaban sus rostros con capuchas llevaron a cabo en la madrugada de ayer un atraco, con empleo de arma de fuego –no se sabe si es simulada o no–, en el salón de juegos Casablanca.com, ubicado en la calle Méndez Núñez, en pleno centro de la ciudad.
Los individuos se llevaron la recaudación que en aquel momento había en caja, entre 3.000 y 4.000 euros, según los responsables del negocio. Un dinero a por el que iban directamente ya que estos delincuentes sabían, perfectamente, cómo tenían que moverse. De hecho, taparon sus manos con guantes para no dejar ni rastro. Los encapuchados iban totalmente cubiertos y “preparados” porque conocían “dónde se encontraba la caja fuerte y todo”, según el encargado del local.
La Policía Nacional trabaja ya en la investigación para conocer quiénes están detrás de este atraco con violencia, que recuerda a otros del mismo estilo que se produjeron en otros establecimientos recreativos, y con los que comparte el modus operandi. Los responsables del establecimiento formularon ayer la denuncia correspondiente en la Jefatura Superior, después de que la Unidad Científica acudiera al local en busca de pruebas que ayuden a las autoridades a dar con los autores de este robo. No obstante, el uso de guantes lo dificultaría.
En el momento del asalto a mano armada, en torno a la 1:10 de la madrugada, dentro del salón de juegos se encontraba una trabajadora y tres clientes que, por fortuna, no sufrieron daño alguno. Los autores se llevaron el dinero de la caja y actuaron encapuchados a sabiendas de que este tipo de establecimientos dispone de cámara de vigilancia y, a partir del visionado de sus imágenes, podrían ser reconocidos.
“Ellos, desde el primero momento, dijeron que no querían problemas, que solo venían por el dinero”, explicó el encargado del salón de juegos. La trabajadora de servicio pulsó el interruptor antiatraco y, en el periodo que la empresa de seguridad notificó el suceso a la Policía Nacional y ésta se personó, los individuos logaron huir del lugar con el botín.
En la noche del atraco vecinos del centro avisaron de la presencia de individuos sospechosos por la zona centro, pero, al cierre de esta edición, aún no se había practicado detención alguna. Algunos residentes recordaron otro episodio, en aquella ocasión con agresión, de hace unas semanas, cuando un individuo atacó a una persona en las inmediaciones de un cajero automático cerca de la Plaza de la Constitución.
El testimonio de la trabajadora al frente del local en el momento de asalto: “Todo fue muy rápido, pero aún tiemblo” La madrugada del lunes parecía igual de tranquila que cualquier otra: dos clientes jugaban a la ruleta mientras que, un tercero, probaba suerte en una máquina tragaperras, tal y como recuerda la trabajadora al frente del Casablanca.com, el salón de juego de la calle Méndez Núñez en el que, sobre las 1.10 horas, irrumpieron tres encapuchados, uno de ellos armado. “Todo fue muy rápido, pero aún tiemblo al recordar cómo ocurrió”, confesó la empleada, pocas horas después de suceder el atraco, detrás del mismo mostrador sobre el que se abalanzó uno de estos individuos para hacerse con el dinero.
Su reconstrucción de los hechos arranca cuando realizaba un pago a través del ordenador de la caja. “De repente, me lo ví encima”, recordó aterrada aunque, como ella misma reconoció, “desde el primer momento me dijeron que solo venían por el dinero”. Al igual que el encargado, advirtió que los tres encapuchados vestían ropa oscura y “sabían lo que hacían”.
El único portador de arma de fuego encañonó a los presentes mientras que su compinche comenzó a desvalijar la caja llenando una bolsa con el botín. El desconcierto cundió entre los presentes y, ante el temor de que el pistolero descerrajase algún disparo, los presentes optaron por seguir el guión escrito por los atracadores.
Nadie opuso resistencia ni los autores del robo agredieron a quienes se encontraban en el local. En menos de un minuto, los delincuentes habían terminado su trabajo y se marcharon hacia la puerta desde donde emprendieron la huida. “Corrieron cuesta abajo, hacia la Marina”, señaló la trabajadora del Casablanca.com.
En ese momento fue cuando, al menos, “dos de los clientes que estaban dentro del salón de juego salieron tras ellos sin que les pudieran alcanzar”, señaló .
Sin duda, éste ha sido el turno más complicado para esta empleada, quien ayer se reponía del susto con el apoyo de todos sus compañeros.