El magistrado del juzgado de lo Penal número dos ha condenado a un hombre por un delito contra la salud pública y ha absuelto a otro por los mismos hechos.
La pena que se le ha impuesto al condenado ha sido de tres años y dos meses de prisión. Precisamente el condenado confesó haber engañado a su vecino y haberle puesto los 16 kilos de droga que la Guardia Civil encontró. Además, exculpó completamente al otro diciendo que éste no sabía nada. El magistrado ha creido su versión y lo ha condenado.