Tres años y dos meses de prisión y una multa de 59.520 euros es la pena que deberá cumplir M.A.H. por un delito contra la salud pública que se produjo el pasado 30 de julio en la Estación Marítima. Allí, el acusado fue interceptado por miembros de la Guardia Civil que prestaban servicio en el control de vehículos al infundir sospechas entre los agentes.
Como consecuencia del registro, se interceptaron 28 bloques de resina de hachís, con un peso bruto e 12.400 gramos y un THC superior al 4%, ocultos en una viga lateral del coche de nacionalidad holandesa y propiedad de un tercero. El acusado, que se conformó con la pena, será expulsado del territorio nacional durante diez años una vez cumpla las dos terceras partes de la condena.