Los desperfectos ocasionados por este y últimos temporales en el entorno del Parque de Santa Catalina se subsanarán a lo largo de este mes de abril, periodo en el que Tragsa quiere ejecutar ya las actuaciones que le han sido encomendadas por el Gobierno de Ceuta.
El objetivo es reconvertir la zona en lo que siempre debería haber sido un parque y, sobre todo, actuar sobre puntos que están deteriorados y que muestran un riesgo más que evidente, toda vez que ha quedado al descubierto la tela que ocultaba el vertedero.
Tal y como detalla el Gobierno local, consciente de todas estas deficiencias, la “intención” si no surge ninguna complicación es que “en este mes de abril” se intervenga como parte de ese proyecto de reforma integral que tuvo que obtener el visto bueno de Costas.
Tragsa quiere recurrir a técnicas de bioingeniería como mantas y mallas orgánicas y geoceldas que se utilizan fundamentalmente como protección frente a la erosión hídrica y eólica. Es una alternativa para evitar lo que ahora es visible.
Además la “revegetación” se hará con especies que se consideren viables para ese entorno, particularmente azotado por la salinidad del mar y el viento. La actuación concluirá con la “revisión y restauración de elementos del parque que puedan encontrarse deteriorados: viales, cunetas, obras de paso, mobiliario e instalación de riego”, se indica en el proyecto.
La inversión es de 4 millones y se ha contado con Tragsa, que además considera este tipo de actuaciones como prácticamente ‘marca’ de la casa al estar especializada en las mismas. En tres años y medio el parque urbano debería ser una realidad frente al vertedero.