La prestataria del servicio de
limpieza pública viaria y recogida de basuras de Ceuta, la empresa
Trace, cuyo contrato venció el pasado mes de febrero, factura cada mes a la
Ciudad cerca de 2 millones de euros (sin incluir el IPSI del 9%) por su trabajo,para el que cuenta con una plantilla que ya supera el medio millar de efectivos, según el censo con el que celebró sus últimas elecciones sindicales.
A la espera de que el Gobierno de la Ciudad reciba los informes técnicos y económicos sobre la viabilidad de que la administración local se haga con
la gestión directa, como planea Vivas en el marco de una reestructuración integral de todos los servicios que se dedican de una manera u otra al mantenimiento urbano, Trace percibirá este año natural cerca de 25 millones de euros.
Su beneficio industrial ronda los 110.000 euros al mes, en función del montante total de cada certificación, ya que equivale al 6% del total.
El primer expediente de modificación del Presupuesto de la Ciudad de este año, aprobado inicialmente con los votos a favor de PP y PSOE, consigna otros 3,8 millones con ese destino.
Solamente los costes de personal directo e indirecto se acerca a 1,4 millones de euros mensuales sin computar el desembolso en antigüedad y ayudas sociales.
El contrato de la prestataria del servicio desde 2013 venció el pasado mes de febrero
La empresa factura a la institución un mínimo de 208 euros por cada barrido o baldeo manual efectuado de lunes a viernes en turno de mañana o tarde. El mismo trabajo cuesta 220 si se realiza durante los fines de semana o en festivo.
El barrido con aspiradora eléctrica autopropulsada cuesta a las arcas municipales entre 832 y 880 euros, según la jornada en la que se haga, y el manual con triciclo eléctrico, entre 312 y 330.
El mecánico de calzadas es más económico (de 215 a 228 euros), pero el de aceras con apoyo de sopladora se dispara hasta por encima de los 600, según las fuentes consultadas por este periódico.
Hasta los 631 euros se dispara el coste del baldeo mixto de lunes a viernes, veinte más si se realiza por las noches, y entre 668 y 693 si se efectúa sábados, domingos o festivos.
La utilización de la fregadora sale por 215 euros y la de la hidrolimpiadora, por 423.
Playas
Trace cobra a la Ciudad 1.255 euros por cada limpieza regular de playas de lunes a viernes, algo más (1.328) si se trata de fines de semana o festivos. Si se trata de una “intensiva” el precio se duplica hasta 2.503 euros.
Los servicios de recogida de basura se facturan a entre 438 y 693 euros, una cantidad ligeramente superior a lo que cuesta el baldeo mixto de los mercados y los trabajos de limpieza de mantenimiento de lunes a viernes de esos mismos equipamientos.
Más cara, por encima de los mil euros, es la limpieza de mercados, mientras que el mantenimiento y lavado intensivo de contenedores se liquida a 631 por operación.
Al margen de los costes directos, la Ciudad Autónoma también debe hacer frente a los indirectos que suponen las remuneraciones de mecánicos, lavacoches, vigilantes, jefes de Administración y Servicios o encargado general, que en algunos casos se acercan a los 80.000 euros al año.
Solamente los costes de personal directo e indirecto se acercan a 1,4 millones al mes
De la misma forma, la administración carga con otros costes como los relacionados con los trabajos prestados por “otras empresas” o los gastos financieros en concepto de avales o pólizas, que cada mes superan los 65.000 euros.
La Consejería de Hacienda del Gobierno de Ceuta impuso en febrero a Trace la obligación de seguir prestando la limpieza pública viaria y la recogida de residuos urbanos (por su “carácter básico y prioritario del que no resulta posible prescindir bajo ninguna circunstancia”) de acuerdo con el Plan de Servicios vigente “por un plazo de un año o hasta la formalización del nuevo contrato si este plazo es menor”. La UTE, participada en un 66,4% por ACC y en un 33,5% por Lirola, debe certificar sus trabajos de manera mensual.
El responsable del contrato propuso “mantener el mínimo preciso para un correcto desarrollo del servicio y un incremento en los precios unitarios de modo que se mantenga el equilibrio económico de la prestación”.
Trace quedó obligada en febrero a seguir prestando el servicio por su carácter “prioritario”
En concreto se estableció una actualización de precios media del 20,5% que se dispara hasta el 33% en el caso del mantenimiento de la maquinaria “dadas sus actuales condiciones derivadas de sus horas de trabajo”.
“El hecho de que sea necesaria esta ampliación del servicio actual se debe a la alta inflación, la dificultad para fijar unos precios estables para los próximos cuatro años y las anomalías derivadas de la ruptura de las cadenas de suministro a nivel mundial”, argumentaron los informes técnicos evacuados.
La continuidad ordenada no puede dar cobertura jurídica a una situación “meramente transitoria”
La continuidad ordenada “no puede servir como un mero pretexto para dar cobertura jurídica a una situación irregular y meramente transitoria que se prolongue indefinidamente en el tiempo”, por lo que la Asamblea debe decidir si pone en marcha un procedimiento para asumir la gestión directa del servicio, como hizo a finales del año pasado con la de los autobuses urbanos, o si licita de nuevo su prestación externalizada, para lo que supuestamente ya tenía casi listos los pliegos del concurso.
Más de mil barridos y casi 200 baldeos mensuales a mano
Trace realiza cada mes “más de 1.100 barridos manuales” de lunes a domingo y “cerca de 200” baldeos con el mismo procedimiento, según las fuentes consultadas por este periódico. En concepto de reposición de contenedores y papeleras el pasado mes de junio pasó a la Ciudad una factura “superior a los 6.000 euros” y solamente liquidó a la administración algo más de 38.000 euros en concepto de servicios extraordinarios para la contratación de algunos peones de lunes a viernes o los fines de semana tanto en horario diurno como nocturno. El Gobierno local ha apostado por
maximizar el aprovechamiento de otros recursos que también paga (como las Brigadas Verdes o el personal de Tragsa, pues los Planes de Empleo 2023-2024 todavía no se han activado) para la cobertura de determinados servicios como la limpieza de los restos de la noche de San Juan, lo que sublevó a UGT. Para la Feria se acordó volver a abrir la mano aunque la incorporación de personal extra vaya a costar unos 300.000 euros adicionales.