“La mochila no se la come ni el gallo ni la gallina solo mi barriga”. Cuántas veces hubiéramos escuchado este cántico tradicional ceutí por los montes de Ceuta. Y es que no hay 1 de noviembre que miles de caballas no se reunieran en los distintos montes de la ciudad, en los últimos años incluso en las payas, para celebrar junto a familiares y amigos el ‘Día de la Mochila’. El maldito virus que nos lleva persiguiendo desde el pasado mes de marzo ha hecho que esta festividad tan peculiar ceutí tampoco se pueda llevar a cabo y este año haya sido imposible ver miles de personas disfrutando de un día de campo.
Con la mochila preparada, sobre todo de frutos secos, las familias caballas se marchaban a pasar el día en el campo. Este domingo reinaba el silencio en los distintos merenderos, donde otros años, las charlas entre amigos, las risas y, sobre todo, el olor a comida eran los grandes protagonistas. Tampoco se apreciaban las miles de tiendas de campañas que, año tras años, los jóvenes amontonaban por la zona y que se tiraban meses organizando con ilusión para pasar varios días de acampadas donde el pasarlo bien era la única condición.
Sanidad anunció, a través de un decreto, la suspensión de esta festividad para evitar aglomeraciones. Para que se cumpliera todo tal y como tenían previsto, Protección Civil lleva velando desde el pasado viernes en García Aldave para no dejar acampar a los ciudadanos e informándole de las distintas medidas que se interpuesto para evitar, aún más, la propagación del coronavirus. Los ceutíes han obedecido y han cumplido con las normas impuestas por las autoridades sanitarias.
Para hacer cumplir las órdenes impuestas por Sanidad, Protección Civil ha montado un centro de coordinación en el Mirador de Isabel II, y ha dividido diferentes grupos por las distintas zonas de García Aldave.
Este año no se ha podido llevar a cabo porque tenemos que concienciarnos que es la única manera de vencer el virus, evitar aglomeraciones que lleven a un contagio masivo. Todos los ceutíes esperan con ganas que en el 2021 todos hayamos despertado de esta pesadilla y que las casetas de campaña, las ‘comilonas’ entre amigos y familiares vuelvan a reinar en el ‘Día de la Mochila’.
Un año de respiro para nuestros montes. Libres de contaminación y basura, mucha basura.