El Gobierno de Ceuta mira con lupa a la empresa Hércules y lo hace en un ámbito complejo marcado por la necesidad de contar con informes de los servicios jurídicos, fundamentados adecuadamente, para justificar por ejemplo una posible rescisión del contrato.
El portavoz del Ejecutivo local, Alberto Gaitán, ha dejado claro en la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno celebrado este lunes que por parte de la institución municipal se está pendiente para que los trabajadores cobren lo adeudado. De hecho hay un grupo coordinado por la vicepresidenta primera del Gobierno para estar pendiente de que todos los pagos que competen a la Ciudad se lleven a cabo con celeridad.
“Hay un grupo de trabajo en la Ciudad para controlarlo, para que se efectúen todos los pagos de la manera mas ágil posible. La Ciudad está alerta y llevará a cabo cualquier acción a su alcance en todo aquello que pueda ser” de su competencia, ha recalcado Gaitán quien si bien no ve adecuado el despido de la trabajadora que se atrincheró en el conservatorio, considera que es un asunto judicializado en donde debe aclararse.
“La Ciudad está preocupada por todos los trabajadores de la empresa, tienen que cobrar sus salarios de manera puntual” y por parte de la institución municipal se cumple “para que no sea excusa el no pagar”, ha indicado. Es decir que en todo este entuerto hay un punto clave: los trabajadores laboran, la Ciudad paga por los servicios prestados, pero el dinero se pierde en un camino marcado por la polémica porque no llega en tiempo y forma a sus legítimos receptores.
Una impresión que “no es buena” pero hay que ser cautelosos
“La impresión no es buena”, ha reconocido Gaitán a preguntas de los periodistas. “Lo que hace la Ciudad es cumplir, una vez recibido el servicio se gestionan las facturas. Eso hacemos, evitamos la dilación en los plazos. A partir de ahí es lamentable que la empresa no pague a los trabajadores”.
“Lo que queremos es que se arregle el problema, que los trabajadores puedan cobrar sus salarios y nosotros pagamos de manera ágil” existiendo “una coordinación de las consejerías para que no queden facturas sin pagar. Este es el trabajo que estamos haciendo y si hay que tomar medidas se tomarán”, ha recalcado.
Para hablar de una posible rescisión del contrato como medida más drástica que podría sufrir Hércules, Gaitán ha insistido en que esta determinación tiene que estar fundamentada y ser avalada por parte de los servicios jurídicos y del área de contratación. No se puede rescindir un contrato de forma ágil y se necesita el informe preceptivo del Consejo de Estado”, ha añadido. En esto precisamente se está.
“Hay que tener una causa jurídica para rescindir el contrato, eso es lo que están analizando los servicios jurídicos, precisamente que no pagan”.