La preocupante situación que está atravesando el centro de FEAPS motivó ayer que la Asamblea, a instancias de su presidente, decidiera constituir hoy un grupo de trabajo para buscar una situación.
Todos los portavoces coincidieron en la necesidad de buscar viabilidad para una asociación que se encarga en Ceuta de la atención a los discapacitados intelectuales, pero que arrastra de numerosas deficiencias en su gestión económica, como lo atestiguan sus numerosas deudas. Tanto PP, PSOE como Caballas también coincidieron en que hay que encontrar un nuevo modelo de gestión.
El diputado de Caballas, Juan Luis Aróstegui, defendió la necesidad de que se iniciara un expediente de modificación de crédito, con una cuantía de 300.000 euros, para sanear las deudas y para que no se generaran nuevos problemas a la hora de pagar nóminas y proveedores. En un principio, el Gobierno se mostró reticente a apoyar la propuesta. No en vano, el consejero Francisco Márquez recordaba que FEAPS se lleva buena parte del presupuesto para asociaciones, así como que se hubiera triplicado su subvención en la última década.
Un problema “poliédrico”
Juan Vivas, por su parte, admitió que en los últimos Consejos de Gobierno, el tema de FEAPS es recurrente, un problema “poliédrico”, tal y como lo calificó, “porque afecta a instalaciones, gestión económica y equlibrio presupuestario”. Por este motivo,fue él mismo el que propuesto al resto de portavoces crear el grupo de trabajo, incluida también la propuesta de modificación de crédito de Caballas. Aróstegui reconoció el interés “de todos” por hallar una salida a las deudas de FEAPS “pero hay cuestiones que sólo pueden resolverse con dinero”, dijo en alusión a los 300.000 euros necesarios para sacar a flote el centro. Carracao, que trabajó durante años en estas instalaciones, recordó que su partido había hablado en otras sesiones de este endeudamiento y que hasta ayer no encontró “sensibilidad” en el Gobierno y lamentó que no se hubiera hecho una fiscalización previa.
Un centro que atraviesa un momento delicado
FEAPS atraviesa un momento delicado, hasta el extremo de que su viabilidad futura se encuentra seriamente comprometida. A la existencia de la deuda, que es de unos 150.000 euros, se añade el desequilibrio estructural en su cuenta de explotación que la conduce a la quiebra si no intervienen las instituciones que la financian, que son la Ciudad y el IMSERSO. Se trata además del único centro para discapacitados intelectuales que existe en Ceuta, lo que da más dramatismo a la situación que vive.