Scalpers prepara su apertura en Ceuta

La firma española de textil Scalpers ya prepara su desembarco en Ceuta. El espacio elegido es un local de la calle Real en el que antes se ubicaba la tienda de Foot Locker, especializada en venta de calzado.

De esta forma la ciudad ve como uno de los bajos comerciales que había quedado vacío recientemente, tras el cierre de la anterior inquilina, puede recuperar la actividad con cierta rapidez.

Las ovejas que entran por las que salen, a la espera de que pueda concretarse la llegada de otras franquicias que han mostrado interés en abrir en la localidad.

Scalpers es una compañía con amplia implantación en el territorio español, con alrededor de noventa tiendas propias, incluida una en la otra ciudad autónoma, Melilla. Además, se encuentra presente en países como Turquía, Andorra, Portugal, Chile, México y Ecuador.

Franquicias que han deslizado su interés por Ceuta

Según afirmó meses atrás el consejero Nicola Cechi, varias franquicias están deseando abrir en la ciudad autónoma. Entre ellas destaca otra del textil, la firma de bajo coste Kiabi.

También podrían llegar próximamente nuevas compañías de comida rápida. Vease Vips o la archiconocida Kentucky Fried Chicken, KFC, ambas con implantación internacional.

En la rama textil también ha trascendido que la firma Intimissimi ha mostrado su interés en trasladarse al centro comercial de Parques de Ceuta.

Big Mat en Alfau

El grupo BigMat, que se autorretrata como “la primera marca internacional de distribuidores independientes de materiales de construcción”, ferretería y bricolaje para profesionales y particulares, está ultimando el acondicionamiento de la nave que hasta hace unos años ocupó ‘Frutas Rocher’ en terrenos portuarios de Alfau para abrir su primer punto de venta en Ceuta.

La firma ya tiene presencia en ocho países de la Unión Europea (Francia, Bélgica, Italia, Chequia, Chipre, Eslovaquia, Portugal y España) y opera con fabricantes de los cinco continentes. A la ciudad autónoma llega de la mano del grupo Hoarce, concretamente de su filial Cemacon, que se sumó al proyecto hace casi dos años.