Sanidad, Protectoras y leishmaniosis

La leishmaniosis canina es una enfermedad producida por un parásito (leishmania) que es transmitido al perro mediante la picadura de un mosquito. El desarrollo de la enfermedad varía en función de los órganos que se vean afectados. Los primeros síntomas pueden aparecer meses después de recibir la picadura del mosquito. La sintomatología más frecuente es perdida parcial del pelaje, caspa, perdida de peso y heridas en la piel.
La picadura del mosquito transmite la enfermedad solo si previamente había picado a otro animal ya infectado.
Los perros NO transmiten la leishmaniosis a las personas. Solo aquellas personas con un sistema inmunitario muy débil podrían contraer esta enfermedad, pero NO por el contacto con perros enfermos, es decir, NO existe ningún peligro de contagio por tener un perro enfermo en casa.
La leishmaniosis se puede curar, si bien es importante diagnosticar la enfermedad lo antes posible. Actualmente NO existe vacuna 100 % efectiva contra la leishmaniosis, aunque si que lo inmuniza bastante contra ella. El riego de contraer esta enfermedad se da principalmente en los países de la cuenca mediterránea y en América Latina. Siendo las épocas de mayor calor las de más riego.
NO existe en el mercado ningún producto que asegure una prevención total contra la picadura del mosquito y por lo tanto no es posible reducir por completo los riesgos de que un perro contraiga esta enfermedad. No obstante hay productos como collares antiparasitarios, pipetas, sprays... que ayudan a prevenirla.
Una vez pasado el verano lo mejor es realizar un análisis al perro, de esta forma podremos saber si se ha contagiado y las posibilidades de curación aumentan, ya que se diagnostica la enfermedad en una fase temprana. Un perro al que se le diagnostiquen  tempranamente la leishmaniosis y se empiece a medicar contra ella tiene muchas posibilidades de vivir una vida larga y bastante sana.
Bien, pues dicho todo esto, ahora toca decir que muchos perros a día de hoy son sacrificados en perreras y protectoras de animales por el simple hecho de dar positivo en leishmaniosis. Da exactamente lo mismo que estén sanos o que dejen de estarlo. También da lo mismo que haya infinidad de productos profilácticos en el mercado para ponérselos a los perros que convivan con ellos y que así no les pique el mosquito. También da lo mismo que existan unos medicamentos en el mercado que le alargan la vida al perro que tiene la enfermedad y que pueden llevar una vida completamente normal. Todo da igual, el protocolo que exige Sanidad y que los representantes de protectoras (me imagino que no serán todas, habrá las que se nieguen a semejante crimen) firman, dice que ese perro no puede estar en la protectora, por lo que tiene que ser adoptado de inmediato o sacrificado. Ya se imaginan,  lo más normal es que sea sacrificado y así cumplir un protocolo absurdo.  
No se como se quedarán, los que siendo representantes de una protectora, tienen que asumir el que un perro por el hecho de contraer la leishmaniosis tenga que ser sacrificado, aún estando más sano y con ganas de vivir. Puede llegar a ocurrir, de hecho ocurre muchas veces,  que un perro con leishmaniosis tenga más salud y le quede más tiempo de vida que a otro que no haya contraído esa enfermedad.
Sanidad normalmente es poco comprensible con los animales, más bien solo piensa en que se cumplan los protocolos de actuación que ellos fríamente dictan, de esto no creo que le quede dudas a nadie. Lo que si es más raro, y no tan comprensible, es que responsables de protectoras no pongan el grito en el cielo y aireen que están teniendo que sacrificar perros por el mero hecho de que han tenido la desgracia de que les pique un mosquito. Una asociación que defiende a los animales está en la obligación moral de defenderlos aunque les haya picado un mosquito. No puede ni debe sacrificar a ningún animal porque un protocolo absurdo diga que no puede estar en la protectora, aunque a este animal le puedan quedar 10 años de vida si se medica contra esa enfermedad.
Desde estas líneas pido una reflexión a todos los responsables de Sanidad para que no dicten unas normas tan duras que hacen que cientos de perros sean sacrificados por protocolos absurdos.  También pediría a los representantes de las asociaciones protectoras que luchen más por la protección de los animales a la hora de firmar protocolos de actuación conjuntos con los ayuntamientos. 
Por último, decir que hoy en día hay tratamientos para los perros que ya han contraído la leishmaniosis, así como para prevenir el que un animal sano no la contraiga, por lo tanto, se merecen una oportunidad: ¡la de NO ser sacrificados por protocolo!   

P.D. Parte de la información sobre la leishmaniosis ha sido recabada de Todoperros.es