El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, ha criticado hoy, a través de las redes sociales, que se le tilde de "racista, fascista e inhumano" por su estrategia contra la inmigración, mientras que España se le ve como la "buena" después de devolver este jueves a Marruecos a 116 inmigrantes que saltaron la valla de Ceuta.
"Después de haber cruzado la frontera española en Ceuta y agredido a los agentes de policía, estos señores han sido devueltos a Marruecos gracias a un acuerdo internacional de hace veinte años", ha escrito Salvini en las redes sociales.
"Si lo hace España está bien, pero si lo propongo yo entonces soy racista, fascista e inhumano", agregó, al mismo tiempo que agrego un vídeo de los inmigrantes con imágenes de El Faro de Ceuta.
Salvini, que está aplicando mano dura contra la inmigración, mantiene retenidos a 150 inmigrantes a bordo de un barco militar en el puerto italiano de Catania (Sicilia, sur) hasta que los países europeos acuerden una solución para reubicarlos.
El líder de la ultraderechista Liga ha amenazado incluso con devolver a los inmigrantes que intenten llegar a las costas italianas si la Unión Europea no gestiona el fenómeno migratorio.
pues si no le parece bien se los mandamos alli