El acuartelamiento García Aldave acogió ayer una formación militar de Sábado Legionario que pasará a la historia como una de las últimas -si no la definitiva- que preside el comandante general, José Manuel Sanz Román.
En dicho acto se despidió de la Bandera de Combate del Tercio, el cabo primero Francisco Javier Cernadas y se nombraron caballeros legionarios de Honor al coronel jefe del Centro de Historia y Cultura Militar, Claudio Domínguez Buj, y al coronel jefe de la Clínica Militar, Jose Antonio Moreno Vázquez, “dos oficiales de prestigio destinados en la plaza de Ceuta, que desde hace muchos años vienen demostrando su cariño hacia La Legión”, explicó el coronel jefe Marcos Llago Navarro. De Cernadas se habló como “un extraordinario caballero legionario de larga trayectoria en las diferentes Unidades de este Tercio”, que ha estado ocupando durante 34 años de servicio diversos puestos en la VI, V, y IV Banderas. “Ejemplo de dedicación, de saber y buen hacer, con su característica alegría legionaria en el desempeño de cuantos cometidos se le asignaran, ha contagiado a todos cuantos han tenido la suerte de compartir cercanía con él durante estos años. Tu numerosa familia ha sido testigo directo, y sufridora también, de todos tus sacrificios y servicios a España. No hace falta que te digamos que éste siempre será tu Tercio”, expresó. El coronel Llago Navarro recordó en su discurso las palabras del fundador, el teniente coronel Millán Astray, dirigida a los legionarios al transmitirles que “podréis ganar galones y alcanzar estrellas, pero a cambio de esto, los sacrificios han de ser constantes…”.
Unas palabras que repitió para recordar a los presentes que “a lo largo de nuestra historia legionaria, unos pocos de quienes sirvieron con gran entrega, dedicación y amor, a La Legión y a España, obtuvieron este gran privilegio”, encabezando así la despedida, con tristeza, al último capitán caballero legionario en activo, que ascendía al empleo superior por todos los méritos contraídos durante su larga trayectoria legionaria, el comandante de la Escala Legionaria de Jefes y Oficiales, Manuel Fresnadillo. Llago Navarro recuperó el mensaje del último Sábado Legionario, en el que pidió que se extremaran y cuidaran los comportamientos de los que iban a desfilar junto a los pasos de Semana Santa, para felicitar a todos ellos por su “conducta, perfecta ejecución e inmejorable imagen transmitida”, significó. El próximo desplazamiento que harán los componentes del Tercio para desarrollar en el CMYT de Chinchilla la fase de ejecución del Ejercicio Principal de la Bandera también fue mentado por el coronel jefe, al recordar que siendo este ejercicio “fundamental en nuestro Programa Anual” hay que poner de manifiesto “todo el esfuerzo diario, así como la importancia de las colaboraciones con otras Unidades de la Comandancia en las imprescindibles acciones Inter-armas. Demostraremos nuestra profesionalidad, rigor, disponibilidad y entrega, especialmente, al llevar a cabo las actividades con riesgos; riesgos, por otra parte, perfectamente conocidos, gestionados y asumidos por todos los Legionarios”, expresó ante un público en el que se notaron más ausencias que en otros actos castrenses del mismo tipo. Sanz Román, aún presente, abandonará en breve su mando de comandante general y ayer la Legión quiso rendirle un especial homenaje, trasladándole su apoyo y confesándole, por boca de su coronel jefe, que “durante todo este tiempo hemos sentido su comprensión y respeto hacia las singularidades legionarias, incluso su identificación con ellas, y hemos sido conscientes, porque así nos lo han demostrado, del cariño y confianza que tienen en sus Caballeros Legionarios. Le estamos profundamente agradecidos y les deseamos lo mejor para el futuro”.