Una mujer y dos menores han sido detenidos por la Policía Nacional en Ceuta cuando pretendían embarcar con hachís adosado a sus cuerpos.
Una manera de tráfico que ha repuntado notablemente este 2025. Son las mulas del hachís de las que tanto se habla, personas a las que se les da una comisión económica para que embarquen portando esa mercancía.
Todos los detenidos han sido asociados con un delito contra la salud pública del que deberán responder en el juzgado.
Los nervios que delataron a una mujer con 1 kilo de hachís enfajado
Este domingo la Policía detuvo a una mujer cuando accedía al interior de la zona de embarque y no se detuvo en el filtro de control peatonal, por lo que fue requerida por una agente policial.
Ese gesto fue el que la delató y el que motivó, tras ponerse nerviosa, que se procediera a su registro.
Al pedirle que mostrara su documentación no supo reaccionar, tampoco sabía responder de una forma clara a las preguntas que se le hizo relacionadas con su estancia en Ceuta y el motivo de su viaje.
Bulto adosado al cuerpo y enfajado
Por tal motivo se procedió a hacerle el correspondiente cacheo superficial, comprobando que llevada un bulto adosado al cuerpo con cinta de carrocero de color blanco y encima de ese bulto llevaba una faja.
Después le fueron localizados dos envoltorios más. ¿Qué llevaba? Cien bellotas de hachís que arrojaron un peso de 1 kilo y 150 gramos. Se suma a las decenas de casos detectados en ese repunte de tráfico de drogas desde Ceuta a Algeciras.
Dos menores con hachís
Pero ese no sería el único servicio practicado, ya que el CNP procedió a detener a dos menores que viajaban solos portando droga.
Pueden hacerlo, porque la ley lo permite, pero los agentes suelen hacer gestiones para saber si esos chicos viajan por algún motivo concreto o están siendo usados para el tráfico de hachís.
Los dos amigos fueron detenidos en la tarde de ayer. Cuando la Policía les preguntó a qué viajaban, dijeron que pasaban a Algeciras y que sus padres lo sabían. Un policía llamó a la madre de uno de ellos, pero esta le dijo que no sabía nada del embarque a la Península. El otro amigo también usó la misma estrategia que fue descubierta.
Estaban mintiendo. A uno se le encontró adosado a la cintura y a sus piernas un total de 23 piezas rectangulares de hachís con uno peso de 2 kilos y 318 gramos. El otro amigo llevaba adosado a la cintura otros 2 kilos y 16 gramos de hachís.
Las marcas de la droga
En este caso el hachís venía marcado con símbolos distintos como las siglas THC, la cara de un gorila, imágenes de plátanos o de albaricoques.
Esas marcas de la droga sirven para identificar a los destinatarios de la mercancía, que recibirán la que tenga ese símbolo impreso.
La mercancía fue toda intervenida por los agentes que procedieron a la detención de los 3 implicados. En el caso de la mujer pasa al juzgado directamente mientras que los menores son presentados ante la Fiscalía.
Repunte de casos
Se ha registrado un aumento de jóvenes que pasan por sus propios medios esta droga, en otros casos son menores manipulados por sus progenitores que son los que les obligan a trasladar esa mercancía.
El hachís decomisado fue entregado en Sanidad para su análisis. Tanto la Policía como la Guardia Civil han aumentado los casos de arrestos relacionados con este tipo de pases de sustancias en pequeñas cantidades, pero siempre eligiendo el mismo método para conseguir el fin último, que la droga cruce al otro lado del Estrecho.