El complicado puzzle político que dejaron las elecciones generales del 23J afronta dos jornadas decisivas para encajar o quedarse sin piezas clave. El rey, Felipe VI, inicia este lunes la ronda de contactos con los partidos para determinar a quién o sí propone a alguien para intentar la investidura. El único gobierno posible parece la alianza PSOE-Sumar; pero el PP, que consiguió el diputado por Ceuta y no cuenta con apoyos suficientes, pretende presentarse para formar gobierno.
Pasado casi un mes desde los comicios, que dejaron un panorama aparentemente ingobernable, la maquinaria para poner en marcha la XV legislatura de la democracia en España está en marcha.
Felipe VI inicia la ronda de contactos con los partidos este lunes, recibiendo, en este orden, a UPN, Coalición Canaria (CC), PNV y Sumar. El martes llegará el turno de Vox, PP y PSOE.
Faltarán EH Bildu, Esquerra Republicana y Junts, que han rehusado acudir a la reunión con el monarca. De la izquierda abertzale ya se conoce su posición. Apoyarán un gobierno de coalición de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, sin poner líneas rojas imposibles de traspasar para el Ejecutivo.
La ecuación de Sánchez, la única aparentemente posible
La incógnita sigue residiendo, precisamente, en las dos formaciones independentistas catalanas. Su apoyo es preceptivo para que PSOE y Sumar puedan gobernar.
El presidente del gobierno en funciones, Pedro Sánchez --a pesar de las manifestaciones de ambos partidos tras las elecciones, solicitando un referendum sobre la separación de Cataluña y la vuelta de Carles Puigdemunt (Junts), prófugo de la justicia española por el plebiscito del 1-O de 2017-- siempre se ha mostrado convencido de poder llegar a una entente sin conceder cuestiones que chocarían con la Constitución y serían francamente impopulares.
Parece la ecuación del líder socialista la única posible para evitar una repetición electoral cantada inicialmente, pero no tan clara una vez, con mínimas concesiones, ha conseguido la presidencia de la Mesa del Congreso. Como en esta, necesitaría a Sumar, PNV, ERC, Junts y EH Bildu.
Feijóo insiste en intentarlo
Repitiendo constantemente el mantra de "hemos ganado las elecciones", el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo ha insistido en presentarse a la investidura desde la misma noche electoral. Sin embargo, sus palabras no han venido acompañadas de apoyos, asegurándose únicamente el de UPN, con Coalición Canaria en duda por la alianza con Vox.
La extrema derecha también llegó a ofrecer sus votos a cambio de nada a los Populares. Una oferta que podría no mantenerse ante el desmoronamiento del partido, con la marcha de Iván Espinosa de los Monteros y a tenor de los visto en la votación de la Mesa del Congreso, donde presentaron a su propio candidato, quedándose sin representación y dejando solo al PP.
La única opción para Feijóo pasaba por seducir a UPN, CC, Vox y PNV, pero estos últimos siempre se han negado tajantemente a cualquier posibilidad de facilitar el gobierno popular.
Con todo, desde la formación conservadora se ha lanzado mensajes dirigidos a Felipe VI pidiendo que se les encargue la formación de gobierno.
Gobierno tardío o repetición electoral
Salvo maniobra maestra por parte de Pedro Sánchez en cuestión de días, la XV legislatura de la democracia española debería demorarse aún. El propio líder del PNV, Aitor Esteban, declaraba este lunes que ve "precipitada" la ronda de contactos por parte del rey, entendiendo que debía haberse retrasado hasta que haya el consenso necesario.
De hecho, Esteban considera que el proceso podría fracasar, siendo necesarias nuevas consultas con el monarca y que no habrá "investidura flash".
Si las piezas no acaban por encajar según pasen las próximas semanas, la sombra de una repetición electoral se ceñirá sobre el país con la caída de las primeras hojas del otoño.